Muro antihuracán continúa debilitándose

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POR ESTO

ISLA MUJERES, 29 de julio.- El muro antihuracán que protege el malecón oriente del Centro Histórico continúa debilitándose, los gaviones que tienen la función de reforzar, se desintegran por la fuerza de las olas y ya se observan grietas en varios puntos, según pudimos constatar.
Con estas grietas se descubrió que no todos los pilotes eran reales, al menos en uno era simulado, no tení­a como base la estructura de acero, solamente tení­a concreto elaborado encima de la roca, justamente, en este caso se observa donde se dio caí­das de tramos del muro por el huracán ”Wilma» en 2005.
Esos gaviones que se instalaron después del paso de ese meteoro, luego de reforzar los tramos caí­dos, se encuentra desechos, debilitados, y en muchos tramos ya no cumple esa función, habrá la necesitada de nueva hilera de este material o bien renovar todo el muro como plantean unos proyectistas de acuerdo a la dinámica marina.
Los miembros de las familias Ravell, Bacab, Garrido, Marfil, entre otros, han expuesto el tema en diferentes momentos a los polí­ticos cuando acudieron en busca de sus votos, pero no avanza una propuesta real hasta la fecha; piden se atienda el reforzamiento en general de más de un kilómetro del malecón, en especial, que se atienda el tramo sur de 150 metros que fue destruido por ”Wilma», por haber sido construido sin los protocolos correspondientes, a juzgar por la forma en que fueron levantados a flor de piedra donde se habí­a colocado la cimentación, por el cárcamo de agua potable de Aguakan.
Se observa también desmoronamiento de gaviones y rocas a causa de la erosión de la base en donde estaban esas estructuras o bien, las rocas originales del lugar. Se amplí­an esas erosiones por las fuertes olas en varios cuevones y suponen debilitamiento de las rocas donde están asentados el malecón y casas edificadas en proceso.
Al bajar en Playa, se observa varios tramos de jaula de gaviones desechos y en otros tramos, simplemente, ya se desintegraron. Entonces, el muro que tiene contacto directo con el mar ya tiene efectos y podrí­a considerarse en su reemplazo para instalar nuevos tramos con forma cóncava en la base frente al mar para amortiguar la fuerza de las olas.

Graciela Machuca

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