LEY CONTRA LA OBESIDAD
Un paso importante dio la Cámara de Diputados al aprobar cambios en los artículos 65 y 66 de la Ley General de Salud, para prohibir la venta de comida chatarra en escuelas y hacer obligatoria la práctica de actividad física 30 minutos al día en los planteles. En este último caso, no significa que se vaya a contratar más maestros de educación física, porque se trata de actividades sencillas de realizar.
Con el objetivo de atacar el problema de sobrepeso y obesidad entre la población infantil, la reforma otorga atribuciones a las autoridades sanitarias, educativas y laborales para apoyar las actividades recreativas, de esparcimiento, culturales y de promoción para fomentar una alimentación equilibrada.
Los integrantes de las bancadas de la Cámara de Diputados votaron por unanimidad, al entender que el problema de la obesidad y el sobrepeso no sólo afecta la salud de millones de mexicanos, muchos de ellos nií±os y jóvenes, sino que además, de no tomarse las medidas urgentes, a corto plazo colapsarían las finanzas de los servicios de salud de todo el país.
Según la diputada Cristina Díaz Salazar, en poco tiempo, nueve de cada diez mexicanos tendría sobrepeso y obesidad, problemas que a su vez originan otros padecimientos como la diabetes, colesterol, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares, entre otros más que provocan muchas muertes en nuestro país.
Estos problemas de salud que son comunes entre adultos de cuarenta aí±os en adelante, ya se presentan en muchos nií±os de primaria y secundaria. No solo afectan su salud, sino que además, perjudican su aprovechamiento escolar.
Las estadísticas son en verdad preocupantes también en Quintana Roo, las estadísticas más actualizadas seí±alan que somos el Estado que ocupa el segundo lugar en obesidad, al menos entre los hombres, aunque en el global no estamos muy lejos de los primeros lugares.
La mayor prevalencia de obesidad en hombres está en el estado de Yucatán con el 31.9 por ciento; Quintana Roo, 31.1 por ciento y Tamaulipas 29.3 por ciento. En las mujeres el primer lugar lo ocupa Sonora con el 47.1 por ciento, Durango 45.5 por ciento y Campeche 44.1 por ciento.
Una rápida mirada a las estadísticas, nos revela un dato por demás interesante: son los tres estados de la Península de Yucatán los que ocupan los primeros lugares en personas obesas, ya sea de hombres o mujeres. Una de las causas es que la comida regional es rica en grasas y carbohidratos, sin olvidar que los peninsulares somos grandes consumidores de refrescos embotellados y de cervezas.
En lo que respecta a los nií±os con obesidad cuyo rango de edad va de ocho a once aí±os, Quintana Roo está entre los primeros cinco lugares a nivel nacional, de ahí la necesidad imperiosa de tomar medidas para evitar que este problema se incremente aún más.
Es un gran paso la reforma aprobada por los diputados federales, sin embargo, los padres de familia tenemos la obligación de concientizarnos y concientizar a nuestros hijos sobre la importancia de alimentarse sanamente.
Muchas veces los mismos padres originamos el problema, al permitir que los nií±os consuman alimentos chatarra antes de preparar una comida sana. Las causas van desde la apatía, hasta la comodidad de comprar un refresco antes de preparar aguas naturales que sí son nutritivas, pero sobre todo, a la falta de una verdadera cultura alimenticia.
Todavía hace falta que el Senado de la República apruebe la reforma a la Ley General de Salud y es en esta instancia donde los personeros de las grandes empresas que producen comida chatarra, tratarán de influir para proteger los intereses multimillonarios de sus representados.
Ninguna ley servirá si los padres de familia seguimos permitiendo que nuestros hijos consuman alimentos chatarra sin poner el ejemplo y tampoco ninguna empresa, por muy poderosa que sea, podrá influir en nuestros hábitos alimenticios si nosotros no lo permitimos.
Jorge Cruz Escalante
Graciela Machuca
