El presidente municipal con origenes

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Julián es el prototipo isleí±o, el del bigote de ”guapo» de los sesentas, el que tiene casa en Isla de Mujeres, pero también en Cancún, el que nació en la Isla de Mujeres, cuando Cancún no existí­a con ese nombre, cuando pertenecí­a territorialmente a la delegación de Isla de Mujeres en el Territorio de Quintana Roo y que creció como todo buen isleí±o, jugando basquetbol en la reducida cancha del centro, entre la iglesia y el palacio delegacional ahora municipal, entre trompadas con los equipos contrarios y más cuando se trataba de competir con ”los camoteros» de la Isla de Cozumel que también era delegación, con las largas borracheras con cerveza, los noviazgos y su primera boda ahí­ en su Isla, la de los sueí±os y los amores juveniles.

Su porte es una mezcla de Isleí±o y algo Cancunences, donde logro terminar la carrera de licenciado en derecho en la universidad Lasalle, donde dio clases en tiempos de crisis económica personal y luego llegaron las épocas boyantes de el empleo en el municipio con el Chacho, en el trienio de Alor le fue muy mal y volvió a la crisis económica, de la que se levantarí­a definitivamente a partir de la llegada de Gregorio Sánchez a la presidencia municipal, quien le otorgo el primer puesto de importancia que tuvo y accedió a los buenos sueldos, pero también a las responsabilidades compartidas de los negocios oscuros, de firmar sin ver y adjudicar sin chistar, del negocio de las lámparas amarillas donde le toco una buena tajada y de su arribo a la candidatura a pesar de no ser el candidato Gregoriano, pero fue el de la negociación con el PRD, para que aquel tuviera el apoyo, tuvo que apoyar a este para que sea candidato municipal, aunque ya en campaí±a y después de que se llevaron a Gregorio Sánchez al penal de mediana seguridad de Nayarit, este lo desconoció y lo sigue desconociendo.

Después de ganar las elecciones, Julián Ricalde recibió una carta de puí±o y letra de Gregorio Sánchez, donde este le pedí­a posiciones en el gabinete municipal para su gente, la que después de leer, Julián Ricalde se la mostro a varios perredistas renombrados y sobre todo cercanos a él, como Rafael Quintanar, Emiliano Ramos, Maru Córdova y Antonio Meckler, después se la mostrarí­a a él chismoso del pueblo y para asegurarse de que se conocerí­a el contenido y la respuesta, también la comento con tres columnistas, diciéndoles que su respuesta puntual fue de que sino querí­a también la Presidencia Municipal, que no le darí­a ninguna posición y mucho menos a los que le nombro, a los que para mayores datos, ”los beso el diablo de Nayarit», el mismo que se la tiene jurada a Julián.

El gobierno que encabeza Julián es muy especial, solo tiene acuerdos polí­ticos con tres personajes que son los que lo han cilindrado de que esta en las mejores posibilidades de aspirar y llegar a la gubernatura del estado, Antonio Meckler desde el congreso del estado manifiesta a quien lo quiere oí­r que para eso trabajan, Miguel Paz es el operador y mientras Miguelito no pruebe licor, trabajara como loco para lograr ese fin, mientras Maru Córdova desde la oficialí­a mayor, es la encargada de buscar fondos para financiar la aventura, para eso ya pactaron con Delia Alvarado, que le construirán el edificio del sindicato del ayuntamiento, pero de ahí­ tiene que salir una muy buena cantidad para hacer la base financiera del proyecto, otras alianzas financieras se están afinando y tienen enredado a ”El Pecas» Antonio Terrazas Lara, director de obras públicas en la búsqueda de porcentajes de obras que solo están en el papel, para esa bolsa polí­tica que ya manejan aunque no tenga mucho dinero, por eso el berrinche, cuando el gobernador Roberto Borge Angulo les gano la obra de la López Portillo, ya que en esos 600 millones de pesos podrí­an rasguí±ar esos recursos que tanto precisan y para hacer verdadera la bolsa.

Julián ha pasado de ser un perredista pobre, a ser un rico polí­tico con í­nfulas de perdona vidas, se compro una casa en el fraccionamiento ubicado enfrente del parque kabah, la empezó a remodelar y antes de terminar por las molestias que ya le reclamaban los vecinos, por el exceso de guaruras, por lavar las camionetas en las calles internas y el cotorreo que se traí­an con entradas y salidas al complejo exclusivo, que vulneraba la seguridad de los vecinos y sus hijos, se compro una residencia valuada en cinco millones de pesos en la supermanzana 17, exclusiva zona residencial de las ultimas desarrolladas por FONATUR en la ciudad de Cancún, una de las camionetas suburban fue obsequio de una prestigiada empresaria hotelera en Chetumal,quien tení­a que proteger a uno de sus dos cachorros que laboraban en zonas difí­ciles y conflictivas en el Ayuntamiento de Gregorio Sánchez y muy cercano a Carlos Trigos.

Quienes conocen bien a Julián, hoy lo ven muy extraí±o, aunque no se le ha quitado lo poca mecha que trae desde las canchas de basquetbol del antiguo casco de isla mujeres, si se ha vuelto más enamorado y muy adinerado y como dicen los clásicos, si hay dos cosas que no se pueden ocultar en esta vida, es el amor y el dinero… y este, trae de los dos.

Graciela Machuca

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