En Q.Roo la ocupación hotelera igual que en 2008, pero no la derrama económica.

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poresto.net

No obstante Cancún ya repunta en el verano con indicadores de ocupación que igualan al 2008, aí±o considerado el mejor del turismo para el destino, Abelardo Vara Rivera, presidente honorario de la Asociación de Hoteles de Cancún, reconoció que estas cifras alegres no son compatibles con la derrama económica que deja el turista durante su viaje. El gasto del viajero sigue contraí­do al menos 10% en comparación con el 2008 y su recuperación se ve distante.
Cancún, refirió, ya ha logrado igualar los porcentajes de ocupación que sostení­a hasta el 2008, previo a la contingencia sanitaria de la influenza y a la crisis económica que impactó a los paí­ses proveedores de turismo.
El destino, dijo, se ha masificado y el volumen de visitantes le permite al destino mantener activas la mayorí­a de sus habitaciones, sin embargo, en la captación económica, sigue deprimido y la recuperación no se ha dado.
”El turista que está captando el destino viene con un gasto limitado y por lo general se hospeda en un hotel de todo incluido, donde la comida y bebida se están cobrando prácticamente al costo para atraer al huésped, pero no genera utilidad ni mayor derrama», expresó.
En este sentido, el lí­der hotelero refirió que si bien la ocupación hotelera se ha logrado mantener con estos precios y servicios, ”no veo la forma de retornar a los aí±os dorados donde el turista que llegaba a la zona, tení­a un gasto promedio de dos mil dólares con una estancia promedio superior a los cinco dí­as».
Actualmente, refirió que el gasto promedio del turista tradicional es de apenas 800 dólares, lo que está al menos 10% por debajo del gasto que se tení­a en 2008, que decir del gasto que se captaba a finales de los 90’s.
Si esta reducción que ya se enfrenta, se hace equitativa al tipo de cambio que actualmente opera en el paí­s, la reducción del gasto del turista se eleva del 18 hasta el 30% de lo que se lograba captar anteriormente.
Esto en el sector hotelero que a pesar de esta reducción ha mantenido su oferta hotelera activa, pero si se encuesta o se contabiliza a cada uno de los sectores productivos del estado, el impacto económico ha sido más severo y ello se ve en la operación que sostienen restaurantes, marinas y otros servicios turí­sticos.
Es importante, resaltó, que así­ como se han hecho esfuerzos importantes por mantener la ocupación del destino, volviendo a Cancún un polo turí­stico masivo, se deberí­an redoblar las acciones para recuperar ese turismo de alto poder adquisitivo que antes se daba.
La infraestructura ya está dada y hay hoteles de gran categorí­a que pueden permitir esa estabilidad y captación, sin embargo, la mayorí­a de los hoteles se ha generalizado y ello ha sido un factor determinante de esa desigualdad en la balanza de ocupación y captación económica que se enfrenta en el Caribe mexicano.

Graciela Machuca

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