Mujer mantenete despierta: por un maí±ana sin violencia

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El colectivo ”Mujeres de Artes Tomar» realizó la tarde del sábado, en la Plaza Mafalda de Colegiales,  una serie de actividades artí­sticas en el marco de una vigilia por el Dí­a Internacional contra la Violencia de Género (25 de Noviembre) y por el Dí­a Mundial para la prevención del Abuso Infantil (19 de Noviembre).

Por Krizia Puig

COMUNICAR IGUALDAD La luz del sol se reflejaba en sus ropas. En la distancia, una tropa de mujeres vestidas de blanco encandilaba  la tí­pica tarde sabatina de los vecinos de Colegiales.  Cada una preparaba un espacio distinto, un lugar especial para compartir en libertad. Mantas en el suelo, banderines, un mate que pasaba de mano en mano y pancartas que gritaban ”¡Ni una muerta más!» pedí­an un maí±ana sin violencia.

El ruido de los tambores fue la invitación. Aquel ritmo tribal estalló cuando todo estaba dispuesto y la convicción por una causa justa, que se traducí­a en cada golpe de percusión, devino en  el brillo que se alojó, de curiosidad y emoción, en los ojos de la mayorí­a de las personas que se encontraban en la plaza. Poco tiempo pasó para que, adultos/as y nií±os/as aceptaran la propuesta de reflexionar, a través de diversas actividades artí­sticas (juegos teatrales, performances, talleres de construcción de susurradores, molinetes, etc.) sobre la violencia de género y el abuso infantil.

Nosotras empezamos como el dúo teatral  Las Chicas de Blanco’, y nos fuimos sensibilizando cada vez más con las temáticas vinculadas al género. Pensamos que estaba bueno convocar a otras compaí±eras y generar algo juntas. Contactamos a personas, no sólo de teatro sino artistas en general: de la música, la plástica, ilustradoras, fotógrafas, dramaturgas, etc. y la respuesta fue masiva desde el comienzo« relata Sandra Posadino, quien junto a Claudia Quiroga, lidera la iniciativa.

Mujeres de Artes Tomar (MAT) se define como ”un colectivo independiente de ideas, proyectos y acciones artí­sticas que visibiliza problemáticas de género y resalta la tarea de las mujeres creadoras«. El procurar la visibilidad de las artistas es una de sus principales banderas ya que, en palabras de Posadino, ”nosotras también nos sentimos un grupo oprimido que tiene que vencer muchas dificultades para que nuestra obra encuentre un espacio de difusión y de visibilidad. Como en casi todas las áreas, en el arte, los puestos de decisión están ocupados por varones. Pero más allá de eso, nos encontramos con problemas comunes a cualquier trabajadora. Por ejemplo, el tener asegurado un lugar donde nuestros chicos puedan quedar a cuidado para nosotras poder trabajar«.

Partiendo de la concepción del arte como una herramienta de transformación social, su metodologí­a radica en combinar intervenciones en el espacio público, acciones pedagógicas y acciones en espacios culturales. La lucha por la erradicación de la violencia en contra de las mujeres, la igualdad laboral y el derecho al aborto, son algunas de las temáticas que han abordado a través de su propuesta.

En el transcurso de la tarde, los y las asistentes también tuvieron la oportunidad de conversar con las abogadas Julieta Bandirali —miembro de la Comisión de la Mujer de la Asociación de Abogados de Buenos Aires- y Alba Cuellar, especialista en tópicos relacionados con abuso infantil y trata de personas.  Ambas concuerdan con que, en Argentina, tenemos muy buenas leyes pero que el tema de la violencia de género trasciende lo legal. Desde el punto de vista de ambas, es necesario superar la criminalización de la mujer pobre y educar desde el lenguaje para tener una sociedad más justa.

El 25 de noviembre de 2011, hicieron su primera intervención en una marcha que habí­a convocado el Municipio de Morón. Hoy, a un aí±o de su nacimiento, la propuesta se está multiplicando en la provincia de Santa Fé, Brasil y Estados Unidos. ”No importa cuanta gente esté hoy aquí­ en la Plaza, sólo que uno de ellos se lleve algo de esta movida. Tratamos de plantear la reflexión desde distintos campos, procurando un abordaje lo más amplio e inclusivo posible. Poco a poco se han ido acercando varones, a los que recibimos con los brazos abiertos. No nos interesa hacer una cuestión únicamente de mujeres. Es una propuesta que nace de nosotras pero que está abierta a cualquier persona que quiera formar parte de ella».

Graciela Machuca

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