Cancún: ¡Abuelita de 103 aí±os de edad!

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Llegó cuando se construyó la carretera de Valladolid a Puerto Juárez en 1955, fue cocinera del campamento chiclero de Rancho Viejo y después fue partera en la zona de lo que hoy es el Parque del Crucero, según relató ayer doí±a Emilia Sequera Raga, quien actualmente tiene 103 aí±os de edad, vive con su esposo Fernando Chuc Pool y su nieta Leticia Castillo López.
Según un mural pintado en una de las paredes los fundadores de Rancho Viejo fueron Anatolio Ricalde Quijano, Fernando Chuc Pool, Concepción Chuc Kinil, Fortunato Mis Pat, Benito Palermo Mex Moo, Honorato Cutiz Tun, Anastasio Chuc Pool, Saúl Alonso Alpuche, Juan Casio Uch Hau, Severiano Uch Hau y Gerardo Viveros Gallegos, sin mencionar en qué aí±o llegaron a fomentar el campamento chiclero.
Doí±a Emilia Sequera Raga, una de las primeras habitantes de Rancho Viejo en la zona continental de Isla Mujeres, nació en Los Sauces, municipio de Tuxpan, Veracruz, el ocho de agosto de 1915 (hace 103 aí±os).
No tení­a su acta de nacimiento a la mano para demostrar sus 103 aí±os, sin embargo, aseguró que cuenta con 103 aí±os de edad, y recordó que vivió los aí±os difí­ciles posteriores a la Revolución Mexicana en 1910 encabezado por Francisco I. Madero.
En al aí±o de 1955, cuando tení­a 40 aí±os de edad, llegó a estas tierras de Rancho Viejo como cocinera en el campamento chiclero, y recordó que cuando se hizo la carretera de Valladolid a Puerto Juárez fue cuando ella vino a estas tierras.
Comentó que no existí­a Cancún cuando ella vino a esta zona selvática a trabajar, solamente habí­a lo que hoy es el Parque del Crucero, o sea la intersección de las avenidas Tulum y José López Portillo, y ahí­ habí­a un paradero de autobuses foráneos y luego la unidad continuaba a Puerto Juárez con los que iban a Isla Mujeres.
Dijo que en este tiempo no habí­a delincuencia en El Crucero ni se mataba la gente en Cancún, porque eran otros pobladores y además habí­a seguridad, no como ahora, que a diario se reciben reportes de ejecuciones, levantones y balaceras. ”Era diferente, el Crucero era paradero, no robaban ni mataban», afirmó.
Doí±a Emilia está casada con Fernando Chuc Pool, originario de Cozumel, quien se encontraba en la casa acostado y no podí­a intervenir en la entrevista, puesto que recientemente fue intervenido quirúrgicamente y no puede levantarse, pero durante algunos momentos hací­a comentarios desde su habitación para recordarle los datos a su esposa.
Ella tuvo siete hijos, tres viven y cuatro ya murieron. Actualmente goza de buena salud, come todo, tales como calabacitas, chayote, yuca, bebe refresco de cola, y dijo que su secreto para llegar a esa edad de los 103 aí±os es solamente comer sano, pero reconoció que le gusta el refresco de cola, una bebida no muy recomendable.
En su casa la acompaí±a su nieta Leticia Castillo López, quien afirmó que su abuela aquí­ vivirá y no regresará a su tiene natal, Tuxpan, Veracruz, porque ya está muy cansada y no serí­a un placer moverse de un estado a otro.
Dijo que en ese tiempo cuando no habí­a carretera de Cancún a Rancho Viejo solamente habí­a un camino mediante el cual traí­an la mercancí­a con mulas, y solamente comí­an frijol, arroz y algo de carne cuando habí­a oportunidad.
El chicle también lo sacaban con mulas a lo largo de unos 15 ó 20 kilómetros hacia la costa de lo que ahora es Cancún, pero desconoce si lo llevaban a Puerto Juárez o a Puerto Morelos para su embargue a los Estados Unidos.
Además de cocinera fue partera, y según relató ella era la única que atendí­a los nacimientos de los habitantes de Puerto Juárez, Isla Mujeres, Alfredo V. Bonfil, Puerto Juárez, Leona Vicario, Central Vallarta, entre otras comunidades o campamentos, pero para entonces ya viví­a en su casa en la ruta 4, cerca del Crucero y ahí­ vive actualmente una de sus hijas.

Graciela Machuca

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