Zona Maya: sabán, recurso cultural sin uso

0

POR ESTO

FELIPE CARRILLO PUERTO, 28 de julio.- Sabán con todo su potencial turí­stico y cultural, hasta el momento no ha podido impulsarlo con el fin de fortalecer la economí­a de esta localidad y sus alrededores. Sin duda, uno de los más imponentes templos coloniales que nos legaron durante la Colonia, lo constituye el majestuoso edificio de la iglesia que existe en esta localidad.
En torno a las investigaciones y recopilación de información por parte del cronista de la ciudad, Mario Chan Collí­, hizo mención que ”este trabajo es resultado de una serie de visitas realizadas a esa localidad de José Marí­a Morelos durante las administraciones municipales 2005-2008 y 2008-2011. Con motivo del CLXXI aniversario de la Guerra de Castas, vale revisar, desempolvar y difundir lo más elemental de un trabajo cuyos datos e imágenes fueron recopilados a lo largo de varios aí±os».
Junto con los prometedores proyectos ecológicos de Dziuché y Kantemó, Sabán se constituyen en potenciales turí­sticos y por consiguiente, pueden generar mejores condiciones de vida para los habitantes de esa zona, considerada de alta marginación social. De acuerdo a la enciclopedia de Quintana Roo que fue coordinada su edición por el historiador Juan Xacur Maiza, Sabán ”es un sitio que durante la época prehispánica correspondió al periodo clásico y postclásico».
En las cercaní­as de la población del mismo nombre ubicada en el municipio José Marí­a Morelos, se localiza este importante asentamiento prehispánico de caracterí­sticas peteneras. Se encuentra integrado por abundantes construcciones de arquitectura domestica, así­ como de plataformas, montí­culos, albarradas y hasta de una importante estructura piramidal. Aquí­ -seí±ala esta enciclopedia- abundan los fragmentos de cerámica y de piedra trabajada, labrada.

Sabán: Antiguo pueblo espaí±ol

Población fundada por los espaí±oles, quienes con el propósito de establecer una encomienda, concentraron en ese lugar a diversos pobladores del oriente peninsular. Se encuentra muy cerca de lo que fue el antiguo poblado prehispánico. El primer encomendero -aí±ade la fuente- fue el capitán Martí­n de Montalvo y Figueroa, quién la mantuvo bajo su mando hasta su muerte en 1764.
Hasta el aí±o de 1795 era un asentamiento de regular tamaí±o con una población de 2 mil 259 habitantes. Después de la población de Tihosuco, Sabán fue el sitio más grande y habitado de esta región. En 1805, con un total de 300 familias de mayas y siete de hispanos o criollos, fue integrada al Partido de Beneficios Altos. Luego después del movimiento de la independencia de México, grandes extensiones de tierras se dedicaron al cultivo de caí±a de azúcar. Después de la ruptura de las relaciones comerciales con Cuba, la región del Partido de los Beneficios Altos y especí­ficamente la periferia de Sabán, Tihosuco y Tepich fueron convertidas en caí±averales para producir azúcar morena, panela y aguardiente con que se abastecí­a el mercado interno y para exportar a pueblos cercanos y ciudades.
Esta actividad, junto con el comercio de contrabando que entraba por Bacalar y que se distribuí­a a través de senderos hacia Tihosuco u otros lugares, donde existí­an almacenes secretos para el resguardo de los productos importados ilegalmente, propició que la población gozara de un auge económico.

Iglesia

La iglesia de Sabán fue consagrada a San Pedro Apóstol. Se encuentra en el centro de la población, misma que dista a unos 50 kilómetros de la cabecera municipal de José Marí­a Morelos y a unos 30 de Tihosuco, municipio de Felipe Carrillo Puerto. Datos obtenidos en la obra Edificios religiosos en Quintana Roo, del profesor Miguel A. Cervantes Aguilar, refiere que la monumental iglesia perteneció al Partido de Beneficios Altos, -una forma administrativa de la evangelización de los franciscanos durante la colonia- y que como dijimos en nuestro reportaje anterior relacionado a Sacalaca, aglutina además, las iglesias de Tepich, Tihosuco, San Antonio Tuk, Polyuc y Chunhuhub, entre otras del estado.
Aí±ade que durante la Guerra de Castas, Sabán fue regida por los mestizos Barrera y Encalada y estuvo sitiada durante los meses de la primavera por el coronel Juan de la Cruz Salazar y tras sufrir diferentes cambios de mando, – espaí±oles-indí­genas-, fue abandonada en 1855. En relación a la iglesia, Miguel A. Bretos cita en su obra ”Arquitectura y arte sacro en Yucatán», que el templo era visita de Ichmul, población que pertenece al vecino estado de Yucatán.
En ”Edificios religiosos en Quintana Roo», se dice que la iglesia es mucho menor que la de Tihosuco, ”y causa la impresión de ser arreglo de una iglesia común, con arcos que sostení­an la bóveda que aún se conservan en su interior. Al costado derecho del sagrario se encuentra un osario, que audaces cazadores de tesoros destruyeron parcialmente; retablo simple, sencillo, sin imágenes y pinturas dignas de tomarse en cuenta».
”Sobre el mismo lado, a escasos metros de la entrada se encuentra el bautisterio cuya pila bautismal, verdadera obra de arte, se encuentra desgraciadamente en los patios de una casa particular». Agrega que tiene de 10 a 12 metros de ancho, con torres a los costados, rematados por campanarios a los cuales se llega mediante sendas escaleras de madera en forma de caracol; rematan éstas con adornos en forma de corona, tal vez con el sello definitivo de cruces de piedra en su cúspide.
La puerta de entrada principal de la iglesia presenta pórtico con columnas finamente labradas, obra sin duda del artí­fice Pascual Estrella (Pascual Ek); la del extremo derecho corre el inminente peligro de derrumbarse, pues se encuentra bastante despegada de su adoso original; la ménsula de la ventana del coro es simple; vestigios de éste existen en el interior del templo representado por algunas vigas quemadas. El profesor Cervantes Aguilar aí±ade que un caso poco común es el hecho de que sobre la ventana del coro, existe una enorme tarja rectangular -un broquel exterior- representando a San Pedro, mirando hacia su derecha al gallo que le recuerda su triple negación.
Remata la fachada en su parte central, espadaí±a en cuyo centro se encuentra un escudo bellamente labrado, siendo la parte central del escudo, una virgen labrada en alto relieve. Concluye el profesor Cervantes Aguilar que posiblemente el atrio amurallado del templo sirvió como cementerio o fosa durante la Guerra Social Maya, considerando los restos humanos encontrados durante las excavaciones dirigidas a nivelar el terreno.
Leonardo Pat, de la comunidad de Pino Suárez, municipio de Felipe Carrillo Puerto y descendiente directo del caudillo maya don Jacinto Pat, batab de Tihosuco, nos facilitó un lote fotográfico que fue tomado probablemente durante la llamada Excursión a Chan Santa Cruz, realizada entre 1900 a 1901, entre ellas, una fotografí­a de la iglesia de Sabán. La imagen muestra evidencias de que la iglesia fue utilizada para guarnecer a las tropas federales del general Ignacio A. Bravo en su paso hacia Chan Santa Cruz, ciudad que tomó el 4 de mayo de 1901.

Graciela Machuca

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *