Cancún, entre el control del crimen organizado y la difusión de noticias falsas por falta de profesionalismo periodí­stico o compromiso ciudadano

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Necesariamente Incómoda

Graciela Machuca Martí­nez
Hay un principio general en periodismo que dice: ”los rumores no se publican, se investigan», sin embargo, con el crecimiento de personas usuarias de redes sociales y el establecimiento de un esquema de negocios que son rentables en la medida que aumenten los números de sus seguidores o los llamados ”likes», esa regla se rompe con frecuencia, afectando en gran medida el Derecho a la Información de la sociedad, a la cual el Estado le debe garantizar ese Derecho a la Información de acuerdo al Artí­culo Sexto Constitucional, pero somos quienes ejercemos el periodismo y ahora, quienes usan las redes sociales, quienes tienen la encomienda de coadyuvar a que se garantice ese Derecho a la Información, el primer sector poblacional desde el profesionalismo y el segundo desde su roll ciudadano, de otra manera no podemos construir ciudadaní­a.
El complejo turí­stico de Cancún es conocido a nivel internacional por sus bellezas naturales y sus servicios, pero también por la violencia generada por la presencia del crimen organizado en la zona, con grupos rivales que se disputan el control de actividades como la trata de personas, tráfico y venta de drogas, despojos, entre las demás del catalogo que contempla la ley federal de la materia.
Desafortunadamente, Cancún sigue estando en las secciones destacadas de medios de comunicación en el mundo, pero ya no por la belleza de sus atractivos turí­sticos, como fue por muchas aí±os, sino por la violencia que se vive en sus calles y hogares, misma que las autoridades del llamado Mando íšnico no pudieron hacer nada para controlarla, al contrario contribuyeron a dimensionar que Cancún no es un lugar seguro, con el actuar de la policí­a el dí­a 9 de noviembre de 2020, cuando una manifestación de activistas contra los feminicidios fue disuelta a balazos, resultado lesionados tres periodistas y una docena de activistas.
Si revisamos los medios de comunicación de Cancún veremos que todos los dí­as hay balaceras, con resultado de personas asesinadas y lesionadas, ataques a negocios, porque el pago de piso se ha convertido en un negocio para el crimen organizado.
La inversión pública en materia de Seguridad Pública es multimillonaria como podemos ver en los presupuestos de egresos de cada aí±o, sin embargo, esas enormes cantidades de dinero que salen de los impuestos del pueblo no son útiles para controlar la delincuencia, mientras que la ciudadaní­a continúa pagando los platos rotos de las autoridades que tal parece que con sus acciones de gobierno, solo experimentan, porque resultados positivos a corto plazo no los vemos.
LA IMAGEN DE CANCíšN FUERA DE QUINTANA ROO ESTí CONSTRUIDA DE REALIDADES Y FALSEDADES
Quienes tenemos la oportunidad de vivir en Quintana Roo, pero por razones familiares viajamos a otras partes de México y del extranjero podemos percibir que si bien es cierto, la inseguridad en las calles de Cancún y de otras ciudades quintanarroenses es sumamente grave, también podemos identificar que una buena parte de esas noticias que llegan a trascender las fronteras estatales y nacionales son falsas.
Pero esa falsedad, no es producto de hechos aislados, o de errores de verificación de quienes las difunden, sino de formas de operar de la delincuencia organizada, así­ como de la clase polí­tica en la entidad, para agudizar el caos y el miedo entre la ciudadaní­a, como se dice en el argot del billar, son tiros de tres bandas, buscan un doble rebote, porque mientras a la ciudadaní­a la mantienen atemorizada y a los visitantes los obligan a encerrarse en los hoteles, los autores intelectuales de estas acciones cumplen sus objetivos de desestabilización social y polí­tica.
Este tipo de estrategias son más recurrente en temporadas electorales, cuando a quienes integran la clase polí­tica en Quintana Roo no les importa atemorizar a la sociedad, porque buscan incidir en el ánimo del electorado, para obtener votos de castigo para tal o cual gobierno municipal o institución estatal.
En Quintana Roo requerimos un sistema de verificación informativa en el que participen profesionales del periodismo, expertos en derechos de periodistas, así­ como de los derechos de las audiencias, académicos y representantes de la sociedad civil organizada, quienes conformen un ente autónomo que su finalidad sea coadyuvar a garantizar el Derecho a la Información, sin pretender quitarle el papel que tiene el Estado, a través de los tres niveles de gobierno, para garantizar ese derecho.
Las noticias falsas no solo ponen en riesgo la seguridad de los habitantes y turistas de Quintana Roo, sino a la afluencia de visitantes y por ende de las inversiones nacionales y extranjeras.
El caos económico que se genera con este tipo de acciones, sumadas a las acciones erróneas de los gobiernos en turno, impactan primeramente en la economí­a de las familias menos favorecidas y de allí­, la crisis se extiende en cascada por todos los sectores económicos de la entidad.
NOTICIA SOBRE BALACERA EN UN BAR DE CANCíšN RESULTí“ FALSA, PERO PUSO EN RIESGO LA SEGURIDAD DE LA ZONA Y ABONA AL CAOS POR LA INSEGURIDAD
Un ejemplo de estas noticias falsas que ponen en riesgo la seguridad de las personas que trabajan o se divierten en el Cancún nocturno se registró durante los primeros minutos del miércoles 26 de mayo, cuando desde una página de Facebook como Quintana Roo Medio Informativo, que tiene más de 60 mil seguidores, se difundió de un ataque armado en el interior de un bar.
Sin citar fuente y sin presentar evidencias durante las siguientes horas se dijo: Balean Bar Xtabay en la región 219. En la primera edición de la publicación habí­an dicho que este antro se encontraba en la región 249 y ante reclamo de usuarios corrigieron la ubicación.
El texto de la supuesta nota periodí­stica dice lo siguiente: ”Un ataque armado se registró en el Bar Xtabay en la región 219, luego de que sujetos armados ingresaran al bar, los cuales abrieron fuego contra las personas que se encontraban dentro del mismo, lesionado a dos personas del sexo masculino, (SIC).»
”Si bien de acuerdo a información extraoficial se seí±ala, que los lesionados se trasladaron por sus propios medios al hospital General».
Posteriormente, el citado establecimiento y las autoridades difundieron su versión.
”En el lugar se entrevisto al C. Domingo Lopez de 36 aí±os de edad por haber nacido el 20 del septiembre de 1984, originario de Cancun, Quintana Roo, de ocupación Gerente, quien refiere que el dí­a de ayer se encontraba en su lugar de trabajo denominado Bar la Xtabay el cual tiene un horario de apertura de 13:00 horas a 23:00 horas mismo que en relación a los hechos ocurridos el dí­a 25 de mayo de 2021 manifiesta que se encontraba en la área de barra supervisando a sus empleados donde eran aproximadamente 20:30 horas donde su establecimiento se encontraba con regular clientela, tal motivo que en relación a los hechos que refieren en las redes sociales son una falsedad ya que no paso nada en el interior del bar por lo que no hubo personas lesionadas o daí±os».
Con esta confrontación de versiones no quiero decir que Cancún viva en tranquilidad y que todo sea miel sobre hojuelas, porque sabemos y hay evidencias que la violencia es el pan de todos los dí­as y noches en ese destino turí­stico conocido mundialmente, sino que tanto las audiencias de medios de comunicación convencionales, como las seguidoras de páginas de Facebook como esta no pueden estar expuestas a que su Derecho a la Información se vulnere por la falta de profesionalismo periodí­stico o compromiso ciudadano de quien difunde información falsa.
Las realidades de Cancún y de todo Quintana Roo se deben exponer al mundo entero, porque ocultar o maquillar información es contraproducente para el desarrollo de la entidad y por ende para la democracia, por lo que se debe fomentar el profesionalismo periodí­stico y el compromiso ciudadano de quienes usan las redes sociales para informar y para hacer empresa.

Graciela Machuca

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