Tulum, rehén de su clase política
Necesariamente Incómoda
Graciela Machuca Martínez
**Víctor Mas, se juega este 6 de junio su libertad al perder su reelección.
**La polarización política no permitirá la negociación de la impunidad en Tulum.
Hace tres aí±os, cuando consultabas en los buscadores de internet sobre lo que pasaba en Tulum encontrabas la difusión de sus bellezas naturales, la publicidad de los servicios turísticos y la crónica de la sana convivencia entre visitantes y residentes, ahora, cualquier motor de búsqueda te lleva a la nota roja, a las reseí±as sobre violaciones a derechos humanos, a la barbarie policial y al canibalismo de la clase política y de la delincuencia que han sentado sus reales en ese paraíso del Caribe Mexicano.
A quienes contienden por la presidencia municipal de Tulum o por las diputaciones local y federal, de los distritos electorales a los que pertenece este municipio quintanarroense, no les importa la seguridad de los habitantes de Tulum, que son los que votan, mucho menos las de miles de turistas que llegan todos los aí±os para fortalecer la economía del sector turístico en el que se encuentran inversiones de diversos países.
Del aí±o 2018 a la fecha Tulum ha sido gobernado por el equipo político al que pertenece el actual presidente municipal con licencia Víctor Mas Tah, quien pretende reelegirse, a pesar el municipio se encuentra en un caos, a pesar de los pocos aí±os de su fundación.
Hoy, hablar de Tulum es sinónimo de ecocidio, corrupción, impunidad, inseguridad, violaciones a derechos humanos por personas servidoras públicas de los tres niveles de gobierno, principalmente de las autoridades municipales, incluyendo a su policía, así como del llamado Mando íšnico que depende de la Secretaria de Seguridad Pública del Gobierno del Estado, cuya independencia normativa y financiera, en lugar de beneficiar a la población, se ha convertido en su peor enemiga.
A pesar que en Tulum las balaceras y los asesinatos ya son el pan de todos los días, al igual que los atropellos a la ciudadanía por parte de la Policía Municipal, Mas Tah busca la reelección, una meta que la tiene muy difícil, por ello se encuentra desesperado, porque sus cartas de presentación son la incapacidad, la corrupción y la impunidad.
En Tulum se preguntan para qué quiere volver a ser presidente municipal Víctor Mas Tah, si ya tuvo la oportunidad de gobernar y no dio el ancho, su incapacidad se ve a tal grado, que en los dos aí±os y medio que estuvo en el ayuntamiento, antes de que pidiera licencia fue incapaz de resolver el problema de la recolección y el tratamiento de la basura, a pesar que es un municipio que requiere calidad en sus servicios públicos para atender las demanda de la industria hotelera y de una población en constante crecimiento.
VíCTOR MAS TAH, INCAPAZ DE DISEí‘AR UN PROGRAMA DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL PARA TULUM
A Víctor Mas Tah carece de las capacidades necesarias para gobernar a un municipio con los retos que tiene Tulum, pues confunde ”la gimnasia con la magnesia», porque no sabe delegar funciones y cuando lo hace recurre a un equipo técnico impreparado como él.
Una evidencia que salta al instante es la determinación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), instancia del gobierno federal que le notificó en abril pasado al municipio de Tulum que el Programa Municipal de Ordenamiento Territorial, Ecológico y Desarrollo Urbano Sustentable del Municipio (PMOTEDUS), publicado el pasado 31 de marzo de 2021, en el Tomo I, número 50 extraordinario del Periódico Oficial del Estado del Gobierno de Quintana Roo, ”no será reconocido por la dependencia federal debido a faltas e incongruencias relevantes que propician el deterioro ambiental del municipio y del estado».
En un escrito dirigido al munícipe de Tulum, Víctor Mas Tah, la Semarnat seí±ala que el PMOTEDUS Tulum no será tomado en cuenta en la obtención de permisos y concesiones competencia de esta Secretaría e iniciará un procedimiento jurídico para su invalidez, ya que no fue tomada en cuenta la participación de la autoridad federal en la elaboración y validación correspondientes.
Este instrumento presenta lineamientos, usos del suelo y criterios de regulación ecológica sobre temas de jurisdicción federal, como ciertos rubros de impacto ambiental y cambio de uso de suelo en terrenos forestales que deben ser abordados de manera conjunta entre los tres órdenes de gobierno, por ello, la Semarnat exhortó al municipio de Tulum a establecer comunicación permanente con especialistas del sector ambiental federal para lograr un ordenamiento territorial en equilibrio con el medio ambiente y los recursos naturales.
Desde luego, que Mas Tah ya no atendió este asunto, porque ya andaba en plena campaí±a, a pesar de que la normatividad electoral se lo prohibía.
TULUM ES RECONOCIDO POR LA VIOLENCIA, LA CORRUPCIí“N Y EL CAOS EN SU CRECIMIENTO
Recientemente, el periódico Reporte índigo publicó algunos trabajos sobre la desgracia que cayó sobre Tulum en materia de inseguridad pública.
En un trabajo de Rubén Zermeí±o, titulado Sangre el paraíso del Caribe Mexicano, Tulum se lee:
”Hoy, el paraíso que buscaba arrebatarle la corona turística a Cancún, es un infierno por la inseguridad, el narcotráfico, el ecocidio, la desigualdad, la corrupción y la complicidad y permisividad de las autoridades encabezadas por el alcalde que busca la reelección: Víctor Mas Tah.
”En Tulum, la violencia está arraigada en la sociedad, prácticamente hay balaceras todos los días y el narcomenudeo reina y controla gran parte de los destinos turísticos y las vidas de los habitantes del municipio.
Y quienes deberían de protegerlos, la policía local, se encarga ”de extorsionarlos y golpearlos sin importar si son turistas o locales, pobres o ricos, como ocurrió con Victoria Salazar, asesinada a finales de marzo por uniformados del municipio.
”En la punta de la pirámide de la violencia y el desfalco se encuentran las autoridades, a quienes los habitantes seí±alan de tener nexos con el narcotráfico. Mientras que la Auditoría Superior del Estado de Quintana Roo le ha comprobado un daí±o al erario municipal por más de 21 millones de pesos, solo durante el ejercicio fiscal de 2019″.
Pero como en la campaí±a electoral todo se vale, Víctor Mas Tah ya acudió a presentar denuncias penales en contra de quien o quienes resulten responsable por amenazas en su contra y el ataque al domicilio de dos integrantes de su equipo.
Los cuestionamientos de la ciudadanía, por su incapacidad para gobernar, retomados por sus adversarios políticos, son para él violencia política, por lo que las autoridades de la fiscalía tendrán que investigar, desde luego que tiene derecho a demandar la protección de la justicia, aunque la impunidad sea el sello que caracterizó su gobierno.
En un recuento hemerográfico realizado por Maya sin Fronteras, en lo que va del aí±o han sido asesinadas 28 personas, 25 hombres y tres mujeres, una de ellas Victoria Salazar, la refugiada salvadoreí±a que fue asesinada por la Policía de Tulum el 27 de marzo.
Con este tipo de resultados de su gobierno, Mas Tah quiere reelegirse, a pesar de que sabe que la ciudadanía ya no lo quiere en la presidencia municipal, pero sus intereses económicos y políticos son tan grandes con sus socios y cómplices que se ha empecinado en contender el próximo 6 de junio.
La clase política que confluye en Tulum tiene como rehén a toda la sociedad del municipio y personas como Víctor Más Tah, consideran que tienen el derecho de gobernar porque se sienten parte de una casta divina, pero será el electorado de este municipio el que le pasará la factura en las próximas elecciones.
Del otro lado, la planilla de Morena que contiende por la presidencia municipal de Tulum, está siendo cuestionada por acciones tanto de Marciano Dzul Caamal, quien la encabeza, como de otros de sus miembros, será la ciudadanía y las autoridades investigadoras, quienes den la última palabra.
Lo que no está a discusión son los hechos, los resultados de un gobierno que ha hundido a un desarrollo turístico de gran potencial, por los recursos naturales con los que cuenta y por las multimillonarias inversiones extranjeras y nacionales que tiene.