Muerte y olvido para mujeres policías en México 

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Necesariamente Incomoda  

Graciela Machuca Martínez 

 

Con el caso de violencia institucional del que fueron víctimas mujeres policías integrantes de la agrupación «Mujer Valiente», de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana del Estado de Campeche, a mediados del mes de marzo, al ser enviadas sin cascos, escudos ni bastones para contener un motín en el Penal de San Francisco Kobén, lo que motivó que fueran golpeadas y agredidas sexualmente por los reos, demuestra una vez más, que el discurso de proteger los derechos de las mujeres solo queda en palabras, buenas intenciones y en una estrategia de propaganda electoral. 

Desafortunadamente, para el movimiento a nivel nacional en pro de los derechos de las mujeres, son dos mujeres a las que se les considera responsables de las agresiones que sufrieron las policías. Una de ellas es la gobernadora Layda Sansores y la otra es su secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana, Marcela Muñoz Martínez, de quien piden su destitución inmediata para poder reanudar el dialogo con el gobierno estatal, pero la gobernadora ya puso en la mesa de negociaciones la destitución de mandos medios, pero ha manifestado su firmeza que la destitución de la secretaria no está sujeta a negociación.  

La inconformidad de policías a provocado un paro parcial de actividades, que si bien es cierto, no ha suspendido los servicios de seguridad, pero si ha puesto en una desventaja a la gobernadora, quien ha fracasado en sus intentos de resolver el conflicto, generado por una estrategia mal diseñada de enviar a mujeres policías a que controlaran un motín en un penal con “abrazos”, ya que no les proporcionaron equipo de protección y disuasivo. 

De las agresiones físicas y sexuales de que fueron víctimas mujeres policías de Campeche, nos vamos al asesinato de mujeres policías en diferentes partes del país. 

De acuerdo, a un corte de la organización civil Causa Común, del 20 de febrero de 2024, del primero de enero a esa fecha asesinaron en el cumplimiento de su deber a 43 policías, de los cuales tres eran mujeres. 

En Quintana Roo, precisamente en Cancún, durante el 2023, fueron asesinadas tres mujeres policías que estuvieron o estaban asignadas a tareas de custodia en penales. 

El 15 de diciembre, cuando caminaba sobre la calle 137 de la Manzana 91 de Cancún, una mujer custodia del CERESO fue asesina a balazos por varios individuos que lograron huir, tras dejar una cartulina con uno de sus acostumbrados mensajes en contra de las autoridades del penal. Se trató de Maricela J., de 35 años de edad, quien había concluido su turno y se dirigía hacia su domicilio. 

El 18 de octubre fue asesinada Luz de Alba “N” cuando salía de su domicilio ubicado en el fraccionamiento Prado Norte, para dirigirse a laborar como custodia en el CERESO de Cancún. Los médicos forenses determinaron que recibió tres impactos de bala. 

Olga Lidia N. fue asesinada a balazos a finales de septiembre de 2023, en la región 260, se desempeñaba como celadora del Centro de Retención Municipal “Torito”, quien siendo custodia del CERESO,  recibió amenazas de muerte, por lo que fue removida de centro de trabajo. 

De las tres servidoras públicas de Quintana Roo, sus muertes siguen impunes. 

Apenas, el pasado 17 de marzo, Kristel García Hurtado, comisaria regional en Pátzcuaro de la Guardia Civil de Michoacán, fue asesinada, junto con dos de sus escoltas mujeres.

El triple asesinato lo perpetraron sobre la carretera libre Pátzcuaro-Uruapan, a la altura de la localidad de San Juan Tumbio. El odio contra ellas fue tal, que al menos una fue decapitada e incendiaron la patrulla en la que viajaban. 

En Guanajuato, un recuento de la organización civil Causa Común al corte del 12 de octubre de 2023 documentó a partir del primero de enero de ese año, un total de 56 agentes asesinados en la entidad, de los cuales 12 era mujeres. 

Esa cifra se incrementó el 18 de octubre de 2023, cuando una oficial de la Policía Municipal fue asesinada, mientras otra policía resultó herida y una civil que caminaba por la zona murió. 

Dos días antes, una sargento fue asesinada a balazos en Irapuato, también en el estado de Guanajuato. Los feminicidios de personas militares es otro tema que debe visibilizarse.

El 20 de febrero pasado, una mujer policía y su hija, de 8 años de edad, fueron asesinadas por personas armadas en Celaya, Guanajuato. La mujer policía estaba de descanso y llevaba a su hija al colegio. El doble homicidio se registró a las seis de la mañana,en la calle Parque Cimatario de la colonia Hacienda Natura. 

Para el 17 de junio de 2023, Causa Común difundió un informe en el que hablaba que del primero de diciembre de 2018, a esa fecha, 33 mujeres policías habían sido asesinadas por sus funciones en Guanajuato, con la consecuente orfandad de sus hijos.

Graciela Machuca

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