Zona Maya: Una vida muy difícil
POR ESTO
KOPCHEN, FELIPE CARRILLO PUERTO, 5 de febrero.- Una situación difícil, se vive en las comunidades indígenas, donde las condiciones económicas son paupérrimas, la gente subsiste con lo poco que produce la tierra, otros buscan otras alternativas como son las artesanías en base del bejuco; mientras que una parte de la población tiene la necesidad de desplazarse a otros puntos de la entidad en busca de trabajo para llevar el sustento familiar.
De acuerdo a la información dada a conocer por la seí±ora Paulina Mex, de aproximadamente 70 aí±os de edad, quien se encuentra padeciendo una enfermedad vascular desde hace más de siete aí±os, mencionó que ”en esta comunidad indígena se tiene muchas necesidades, los vecinos tienen que buscar la forma como subsistir, por lo que algunos realizan labores del campo, otros se dedican a la artesanía y mientras que otra parte de la comunidad tiene que desplazarse a otros puntos del estado en busca de trabajo.
Doí±a Paulina, en lengua maya comentó: ”Mientras que lavaba pese a la enfermedad que presentaba, que en mi caso, padezco esta enfermedad, pero tengo que buscar la forma de cómo subsistir, toda vez que somos de escasos recursos, no cuento con una vivienda digna, en tiempo de frío, se reciente mucho en estas casitas de madera y huano, es por eso, que tengo la necesidad de contar con una casa digna».
Refirió que ”en esta comunidad, se tienen muchas necesidades, es el caso de la falta de un centro médico, únicamente llega a la localidad la Caravana de Salud, pero nos visitan cada 15 días, y la gente que se enferma tiene la necesidad de viajar a otras comunidades, donde hay servicio o en su caso, uno tiene que viajar a la cabecera municipal. En mi caso, tengo que viajar a la ciudad de Chetumal para que me atiendan, pero con el paso del tiempo me he quedado sin dinero, y esta enfermedad simplemente no tiene remedio».
Asimismo, comentó que ”junto con su esposo, realizan la siembra de plátano, ya que logramos vender las hojas o en su caso el fruto y de esta manera buscamos la forma de subsistir, no nos queda de otra, así vamos a seguir trabajando».
Mientras que Jaime Cahuich May, quien regresaba de la milpa y además de jalar bejuco bajo el monte, como materia prima para la elaboración de cestos, comentó en lengua maya, que ”tenemos que buscar la forma de cómo subsistir esta situación que se vive en muchas comunidades indígenas, en mi caso, junto con algunos familiares desde a muy temprana hora, nos fuimos a la milpa para traer un poco de maíz, pero aprovechamos para conseguir bejuco como es el A’k xux, o en Ku’un ak, que son este tipo de bejucos que se pueden manipular con facilidad para la elaboración de las artesanías.
Pero dijo que dado que ahora gran parte de la comunidad de Kopchén, ya se está dedicando a esta actividad, ya no es tan fácil conseguir la materia prima, ahora tenemos que adentramos lo más lejos posible dentro de la selva para conseguir este tipo de bejuco, para luego sancocharlo y pelarlo e iniciar con la elaboración de cualquier tipo de artesanía, cuya materia prima sea el bejuco.