Consejeros muy bien pagados y candidatos en la miseria en Q Roo

CHETUMAL, 27 de junio
Javier Chávez

Mientras la posición de Consejero del Instituto Electoral de Quintana Roo (IEQROO) ronda la cúspide de la burocracia muy bien pagada y con acceso a ciertos privilegios, frente a ellos hay un panorama desolador, con candidatos de partidos pequeí±os que a duras penas hacen campaí±as, rumiando sus miserias a la menor provocación, con el tanque de gasolina en la reserva.

Llueve o truene, un Consejero del IEQROO percibe 66 mil 073 pesos al mes, según el tabulador del Instituto.  Pero además tiene acceso a una conquista muy jugosa: contar con un asesor que devenga 21 mil 165 pesos al mes, seleccionado en muchos casos con criterios de amiguismo o compadrazgo.

En aí±o no electoral, un Consejero tiene funciones cercanas al cero, a un paso de la hibernación. Y pese a ello, conserva en nómina su respectivo asesor que asume funciones de aviador, sin que el IEQROO cuente con un equipo que evalúe sus capacidades para justificar tales contrataciones.

El Consejero del IEQROO se despacha con la cuchara grande en tiempos electorales, ya que tiene acceso a todo tipo de apoyos financieros para viajar, absorbiendo viáticos lejos del escrutinio social. Los gastos fluyen a ese nivel, con la excusa de supervisar ciertas acciones programadas en el calendario, e incluso extraordinarias.

Ante este panorama de opulencia, los candidatos de partidos como PRD, PT y Movimiento Ciudadano dan lástima, ya que sus respectivas dirigencias los mantienen a pan y agua, con categorí­a de mendigos que deben ir a la caza de espacios en medios de comunicación, pero padeciendo por la falta de dinero  para gasolina o unas tristes tortas y refrescos.

Sin herir  susceptibilidades, candidatos de partidos como Movimiento Ciudadano permanecen encerrados en sus casas porque no tienen dinero para movilizarse. Si acaso consiguen mil pesos para hacer acto de presencia en una colonia, donde antes candidatos del PRI sin tirar la casa por la ventana hicieron una labor buena a seca, con equipos de avanzada y comitivas expertas, pródigas en el reparto de los utensilios tan solicitados por chicos y grandes: vasos, playeras, gorras…

El dinero no fluye para ellos y las campaí±as son muy disparejas.