Punta Cancún, en manos del crimen organizado municipio gobernado por el PVEM
Desde hace varios aí±os, la zona de Punta Cancún, conocida como el ”corazón de la zona hotelera», se encuentra convertida en una verdadera zona de riesgo que es controlada por el crimen organizado, el cual opera las extorsiones, prostitución, venta drogas y hasta de brazaletes para ingresar a las discotecas, con total impunidad.
La reciente doble ejecución perpetrada en contra de trabajadores de la discoteca Mandala y Congo Bar, es un claro ejemplo de cómo los grupos delictivos han logrado el control de la principal área turística de Cancún en cuanto al ambiente nocturno.
A pesar de que durante el día existe una aparente calma, una vez que cae la noche la zona se convierte en una verdadera zona de peligro que se siente al recorrer todo lo que se conoce como ”Callejón de los Milagros», en donde es claro observar cómo un ejército de ”jaladores» invita a los turistas a entrar a las discotecas, table dance donde se ejerce sin el menor de los problemas la prostitución de mujeres, muchas de ellas de origen extranjero.
Para ingresar a estos lugares, la venta de brazaletes se vuelve una locura y en muchos casos, de forma abierta y en completo descaro, se ofrece la libre venta de drogas y se garantiza que no habrá ningún tipo de problema porque quienes la distribuyen tienen el completo control.
Y es que todo esto ocurre ante una evidente complicidad criminal de los cuerpos de seguridad de los tres órdenes de gobierno y una nula exigencia de los empresarios turísticos para que exista seguridad en esta zona de Punta Cancún.
Esto es lo que ha permitido que la delincuencia se haya apoderado desde hace varios aí±os de la zona de discotecas de Cancún, donde el cobro de derecho de piso también es una práctica común a la que han tenido que acceder los dueí±os de negocios del lugar para evitar problemas mayores y que puedan trabajar tranquilos.
Hace nueve aí±os aproximadamente, esta zona del ”Callejón de los Milagros» se marcó también con el homicidio de un turista asiático que se negó a comprarle droga a un insistente vendedor que de entre sus ropas sacó un cuchillo y se lo clavó en el estómago.
Y desde entonces, la delincuencia organizada ha crecido y se ha apoderado de la zona bajo complacencia de la Policía Federal, la propia delegación de la Procuraduría General de la República (PGR), la Policía Turística, la hoy Fiscalía de Justicia a través de la Policía Ministerial (antes Policía Judicial) e incluso las propias fuerzas armadas como es el caso de la Secretaría de Marina que cuenta con una base de operaciones en la Zona Hotelera.
Pero esto, es un claro ejemplo de que si un pequeí±o espacio como lo es Punta Cancún no ha sido cuidado por las autoridades y por ende, permitido que la delincuencia lo controle como hasta ahora, lo mismo ocurre en todo el resto de la ciudad donde a base se sangre y plomo, los grupos delictivos se han apoderado de la tranquilidad de Benito Juárez.
POR ESTO!
Graciela Machuca
