Aumenta inseguridad en Cancún municipio gobernado por el PVEM

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Cinco casquillos percutidos calibre .45 milí­metros y un arma calibre .9 milí­metros abastecida, fue lo que se halló tras el reporte de detonaciones de arma de fuego en el Mercado 28, lo que se dio la noche de este miércoles.
El Ministerio Público del Fuero Común inició el expediente con número de caso 2570/ 2017, aunque hasta la tarde de este jueves nadie se habí­a presentado a denunciar por este hecho.
La Fiscalí­a General del Estado (FGE) informó que en relación al reporte de detonaciones de arma de fuego en la Supermanzana 28, manzana 6, del estacionamiento del Mercado 28, el Ministerio Público del Fuero Común inició el expediente con número de caso 2570/ 2017.
Seí±alaron que al momento de llegar agentes de la Policí­a Ministerial y peritos aseguraron en el lugar cinco casquillos calibre .45 milí­metros y una ojiva, mientras que posteriormente en la búsqueda se reportó que en calle Grosella de la Supermanzana 25 se aseguró un arma calibre 9 milí­metros, con el cargador abastecido.
No obstante, aseguraron que hasta la tarde de este jueves no se presentó a denunciar la posible ví­ctima, por lo que se desconocen a ciencia cierta los móviles de la agresión.
Este hecho sucedió a las 20:20 horas de ayer, cuando el servicio de emergencias 911 recibió el reporte de disparos de arma de fuego en el estacionamiento del mercado.
Los primeros en llegar fueron elementos de la Policí­a Municipal, quienes fueron informados por testigos presenciales que los presuntos responsables que habí­an hecho los disparos eran dos hombres, quienes habí­an escapado corriendo por la avenida Tankah. Por tal motivo las autoridades implementaron un operativo para tratar de ubicar a los dos hombres, sin poder dar con ellos.
Respecto a este hecho trascendieron tres versiones extraoficiales: la primera fue que las personas que realizaron los disparos trataron de ejecutar a un taxista en el estacionamiento del mercado, mientras que la segunda fue que le dispararon por negarse a prestarles el servicio y otra, la que fue dada por las autoridades (y que últimamente utilizan para justificar cualquier agresión con arma de fuego), fue de que se trataba de un robo.

POR ESTO!

 

Graciela Machuca

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