Aumenta inseguridad en Cancún municipio gobernado por el PVEM
POR ESTO
En una zona de pesadilla es como se han convertido las inmediaciones del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún con tantos motines y zafarranchos violentos que cada vez se tornan mucho más peligrosos porque con las condiciones actuales del penal, se corre el riesgo de darse una fuga masiva.
Y es que los disturbios cada vez suben de tono y el peligro es inminente para todos los residentes de la Región 99 que habitan en las cercanías del penal de Cancún, mismo que se encuentra convertido en un verdadero polvorín.
A pesar del incremento de las supuestas medidas de seguridad que incluyó el levantar más las bardas del perímetro exterior, colocar un portón alto y un acceso con una aparente mayor vigilancia, el verdadero problema de la cárcel de esta ciudad es la corrupción e impunidad que existe dentro.
Esto, porque las mismas autoridades de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública han permitido que el autogobierno mantenga el control del Cereso y sean ellos quienes dicten las reglas de lo que entra y no al penal, muy por encima de lo que pueda hacer o decir el propio alcaide.
De nada han servido los últimos traslados de internos a penales federales como el más reciente de 14 reos relacionados con delitos de alto impacto que estaban recluidos en el Cereso de Cancún, pues quienes representan el verdadero peligro son intocables porque son quienes mantienen las extorsiones de familiares de presos de nuevo ingreso y hasta con los que tienen varios meses.
Los cobros de estas extorsiones varían dependiendo del delito por el cual es juzgado el nuevo interno y para ello, obligan a los familiares al pago de cuotas mediante depósitos en los Oxxo´s, lo que confirma que se trata de una vasta cadena de complicidades de reos vinculados con el crimen organizado.
Dentro de toda esta cadena de complicidades que convierten al penal de Cancún en un grave lunar de corrupción e impunidad y que mantiene sus alrededores en una constante zona de peligro y pesadilla total, el gobierno federal tiene parte de la culpa porque ha demostrado un completo desinterés por Quintana Roo para atender el problema carcelario.
Pero de igual manera, el nulo trabajo político del ”gobierno del cambio» para exigirle a la federación una solución al problema del Cereso, pues incluso el propio gobernador, Carlos Joaquín González, desconoce no sólo la ubicación, sino hasta la situación del terreno en Leona Vicario donde se ha pretendido durante muchos aí±os el proyecto del nuevo penal para Cancún
Graciela Machuca
