Chetumal: Desbandada en la directiva del Cereso

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POR ESTO

En cascada, presentaron su renuncia el director jurí­dico, cuatro abogados defensores de oficio y una trabajadora social, del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún; con lo que quedó prácticamente desmantelada la estructura directiva del Cereso de Cancún, envuelto en medio de amenazas, extorsiones y sin liderazgo.
Con ello, el penal prácticamente queda en manos del ”autogobierno», multiplicándose los riesgos, pues a pesar de las renuncias y del peligro que eso representa, el Gobierno del Estado no ha logrado solucionar el grave problema del Cereso.
La situación en el Cereso de esta ciudad, parece ir de mal en peor, pues no hay nadie al frente, aún con el peligro que esto representa.
Y es que ayer trascendió de manera extraoficial, que desde el lunes de la semana pasada, Javier Fuente Jiménez presentó su renuncia como encargado de despacho del Cereso de Cancún.
Tras la huí­da de Jorge Adrián López Valenzuela, dejando el cargo de director del Cereso, la Secretarí­a Estatal de Seguridad Pública nombró como encargado de despacho al director jurí­dico.
Sin embargo, el lunes de la semana pasada, cuando se decidió el traslado de varios reos a otros penales, el director jurí­dico se negó a firmar los traslados, pues habí­a quienes contaban con amparos vigentes para no ser trasladados.
Después del motí­n que iniciaron reos del área de la ”I», para impedir el traslado de un interno apodado ”El Percas», el cual finalmente no pudieron sacar de su celda; el director jurí­dico presentó su renuncia.
A una semana de esa situación, el Gobierno del Estado no ha designado a alguien que tome las riendas del penal más peligroso de la entidad.
Sumándose a esa renuncia, ayer mismo trascendió que cuatro abogados defensores de oficio, asignados a los juzgados penales que alberga el Cereso, también presentaron su renuncia ante la falta de garantí­a de seguridad que viven en el penal y sumándose a esas renuncias, también trascendió la renuncia de una empleada de la Dirección de Trabajo Social del Cereso.
De esta forma, el Cereso de Cancún se encuentra prácticamente en manos del ”autogobierno» conformado por los reos, quienes mantienen el control de amenazas, extorsiones, tráfico de drogas y otros delitos que siguen cometiendo aún en cautiverio.
La seguridad del Cereso está en manos de la Policí­a Estatal Preventiva (PEP), lo que resulta insuficiente, tomando en cuenta que el penal alberga a más de mil internos, muchos de ellos, considerados de alta peligrosidad.

Graciela Machuca

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