La epidemia del silencio, la impunidad y del terror cubre de luto al gremio periodístico en México
Necesariamente Incómoda
Graciela Machuca Martínez
Armando Linares es el nombre del periodista asesinado este martes 15 de marzo en el estado de Michoacán, donde la violencia, al igual que en el resto del país, está destruyendo el tejido social, mientras las instituciones y sus políticas públicas van perdiendo la batalla, así como nos pasa a quienes hacemos periodismo, solo nos está quedando contar a nuestros muertos, evitando pensar que la próxima víctima podamos ser nosotras o una compañera o compañero cercano, del mismo medio o de la misma ciudad donde residimos.
Hace unas semanas le correspondió al mismo Armando Linares, director de Monitor de Michoacán transmitir la noticia de que Roberto Toledo, otro periodista de ese medio que trabaja desde Zitacuaro, Michoacán, fue asesinado.
Armando Linares dijo en aquella ocasión, el 31 de enero pasado, que desde hace un año venía recibiendo amenazas de muerte a consecuencia de su trabajo periodístico. La delincuencia organizada decidió acabar con Monitor de Michoacán y este año ya mató a dos de sus periodistas.
Con este doble homicidio de dos periodistas de Monitor de Michoacán queda demostrado que cuando la delincuencia organizada decide cerrar un medio segando la vida de sus periodistas lo hace sin que el Estado pueda hacer nada, pues esa delincuencia tiene atado de manos al Estado mexicano.
Luego del escándalo que armó el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, con el comunicado del Parlamento Europeo sobre la violencia en contra de periodistas mexicanos, todo quedó en reclamarle la forma en que dicho órgano legislativo intenta incidir en la política mexicana, pero el gobierno federal fue incapaz de proponer una solución al fenómeno de la violencia contra las personas trabajadoras de medios de comunicación.
Con excusas políticas el presidente desvió la atención del asunto que nos incumbe a las personas periodistas en México, al gremio periodístico lo siguen matando. Las razones políticas de la Derecha parlamentaria europea son muy claras al dirigir la misiva al gobierno mexicano, ese comunicado tiene serias deficiencias de información y percepción, pero lo que si es cierto es que en México siguen matando periodistas y el presidente Andrés Manuel López Obrador no tiene ninguna estrategia para garantizar la seguridad física y jurídica de quienes ejercemos el periodismo, pues al contrario, todas las mañanas cuestiona lo que hacen o dejan de hacer los medios de comunicación, porque está convencido que el periodismo es sinónimo de propaganda y complicidad.
Esta semana el gremio periodístico mexicano sigue de luto y una familia mexicana más enfrenta en carne propia la violencia que se ha apoderado del país; con los dos asesinatos del personal de Monitor Michoacán es inminente el cierre de este medio de comunicación, con lo que no se cerraría solo una fuente de empleo, sino un medio que coadyuva a que la sociedad de Michoacán ejerza su Derecho a la Información.
No solo perdieron la vida Roberto y Armando, así como las familias que viven en torno a Monitor de Michoacán, sino la sociedad michoacana y la mexicana en general, porque ahora ha dos voces menos y pronto un medio de comunicación menos, la pandemia del silencio se sigue extendiendo y arraigando por todo el territorio mexicano.
Desde hace años identificamos las llamadas zonas del silencio, donde ya no se hace periodismo porque las y los periodistas le temen a la delincuencia organizada, a las personas servidoras públicas coludidas con la delincuencia organizada, pero también porque esa dupla de complicidades, ya se han quedado con periódicos impresos, digitales, estadios de radio y televisión, por lo que la única voz que se escucha en la del silencio y el terror.
El embajador de Estados Unidos Ken Salazar, por medio de su cuenta de Twitter lamentó “escuchar la noticia del asesinato de Armando Linares, Director de Monitor Michoacán. Estados Unidos apoya firmemente a los valientes periodistas mexicanos que defienden la #democracia y la #LibertdadDePrensa”.
En un segundo mensaje escribió: “Apoyamos a las autoridades, quienes actúan rápido para investigar este caso, dar con los responsables, y ofrecer justicia a Armando y a su familia”.
Recordemos que a principios del mes de marzo, la vocera del gobierno de Estados Unidos, ratificó un mensaje del secretario de Estado, quien habló de la violencia contra periodistas en México, tras algunos días que un senador visibilizó los asesinatos de periodistas en nuestro país.
El pueblo mexicano tiene un serio problema, porque tiene a un presidente que no ve, no oye, no siente lo que pasa en el país, todo mundo ve la realidad, solo él y su equipo de colaboradores fieles, que cada día es más pequeño, ven un país diferente. Pero tanto en otros países y en México sentimos y vemos que a quienes ejercemos el periodismo nos están matando.
A pesar que la Fiscalía General del Estado de Michoacán, donde gobierna MORENA, dictó medidas cautelares a favor de las personas que acudirían al velorio de Armando Linares, durante la tarde del miércoles 16 de marzo, un hombre armado que estaba en la sala de la funeraria, con pistola en mano obligó a todos los periodistas abandonar el lugar.
La FGE inició Carpeta de Investigación con relación al homicidio de Armando Linares López, director del portal Monitor Michoacán, registrado la tarde del 15 de marzo, en la colonia Carabanchel, en la ciudad de Zitácuaro, informó la dependencia.
Detalló que a las 18:40 horas, personal de la institución fue informado sobre el homicidio del periodista, quien fue agredido por disparos de arma de fuego; su cuerpo fue localizado en el acceso a su domicilio ubicado en la calle Dr. Emilio García de la citada colonia, y a simple vista presentó heridas en la región toráxica.
Durante el procesamiento de la escena del crimen, por fuera del inmueble se recolectaron cinco casquillos y dos cartuchos calibre 9mm, mismos que fueron fijados y embalados para su posterior análisis. De igual forma, en el sitio se aplican las especialidades periciales en criminalística, medicina, lofoscopía, fotografía y química, según comunicado de la Fiscalía.
Además, se ordenó dar vista a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión de la Fiscalía General de la República, a efecto de hacerle de conocimiento del hecho y que determine lo conducente.
Armando Linares López, se suma a las otras personas periodistas asesinadas durante 2022: Juan Carlos Muñiz, Heber López, Lourdes Maldonado, Margarito Martínez, Roberto Toledo, José Luis Gamboa y Jorge Luis Camero, este último baleado el 24 de febrero, dos semanas después de haber dejado su cargo en la alcaldía de Empalme, Sonora.
Desde su sede en Miami, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó que «una nueva tragedia enluta al periodismo mexicano», en referencia al asesinato del periodista Armando Linares, el octavo ocurrido desde enero en el país. La organización llamó al Estado de México a atender con responsabilidad y seriedad los reclamos para frenar la violencia contra los periodistas.
Al condenar el crimen, el presidente de la SIP, Jorge Canahuati dijo que «si bien la invasión de Rusia en Ucrania absorbe ahora la atención sobre los periodistas caídos, no debemos olvidar que en México los periodistas viven atrapados y enfrentando desde hace años ataques violentos, sin siquiera recibir la atención debida de su propio gobierno, que reacciona a la defensiva ante cada reclamo».
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Carlos Jornet, añadió que «ya es hora que el presidente de México tome cartas en este asunto y atienda los múltiples reclamos a nivel nacional e internacional para que cree estrategias adicionales para la seguridad de periodistas».
Graciela Machuca
