”El periodismo es el chivo expiatorio de los fracasos del Gobierno»
CDP
Difícilmente la presidenta Cristina Fernández de Kirchner coincidiría con Thomas Jefferson, recordado presidente de los Estados Unidos que 200 aí±os atrás afirmó: ”Si tuviera que elegir entre un gobierno sin prensa y una prensa sin gobierno, no vacilaría un instante en preferir lo segundo».
Con esas palabras inicia su análisis el periodista Fernando Laborda, del diario La Nacion, para apuntar luego : más aún, es probable que la jefa del Estado argentino, puesta a optar entre un país con prensa y otro sin ella, privilegiara esta última alternativa. Después de todo, Néstor Kirchner confesó alguna vez que prefería los fotógrafos a los periodistas porque aquellos no formulaban preguntas, al tiempo que su esposa y sucesora en el Poder Ejecutivo se preocupó por aclarar más de una vez que no precisa del periodismo como intermediario, pues ella se comunica directamente con el pueblo.
El filósofo político Ernesto Laclau, quizás el referente ideológico más relevante paraCristina Kirchner, admitió que el principal adversario del Gobierno está representado por los medios de comunicación. Para los Kirchner, ha habido siempre una natural disputa entre la política y los medios por determinar quién fija la agenda pública, una preocupación que ha derivado en una deformación por la cual se piensa que el poder político debería ocupar el lugar del periodismo.
Para los Kirchner, ha habido siempre una natural disputa entre la política y los medios por determinar quién fija la agenda pública, una preocupación que ha derivado en una deformación por la cual se piensa que el poder político debería ocupar el lugar del periodismo.
La concepción kirchnerista sobre el papel de los medios de comunicación aparece descripta por el propio Néstor Kirchner en una conversación registrada a poco de llegar a la Presidencia de la Nación con el escritor José Pablo Feinmann, que este reprodujo en su libro El flaco. El entonces jefe del Estado seí±aló en ese diálogo: ”¿Cómo se construye poder hoy? No me vengas con la militancia tipo Jotapé. Con unos treinta minutos en horario central de cualquier canal de televisión consigo más que con diez mil militantes haciendo laburo territorial».
Esa obsesión kirchnerista por controlar a los medios de comunicación se relacionó en los últimos aí±os, especialmente a partir del conflicto entre el gobierno de Cristina Kirchner y el campo producido en 2008, con la idea de asociar al periodismo no afín al pensamiento oficial con una suerte de gran poder en las sombras, peligrosamente destituyente.
Al mismo tiempo, frente a la imposibilidad del kirchnerismo de responsabilizar por sus problemas de gestión a una administración anterior, luego de tantos aí±os en la Casa Rosada, la Presidenta encontró en la prensa un chivo expiatorio al cual culpar por sus fracasos. De ahí que su gobierno haya intentado difundir la idea de que la inseguridad, cuestión que está a la cabeza de las inquietudes ciudadanas en las encuestas de opinión pública, era tan sólo una sensación impuesta por la acción de los medios de comunicación.
Fuente:
http://www.estoestucuman.com.ar/?p=8845