Aumenta violencia en Cancún municipio gobernado por el PVEM
POR ESTO
La inseguridad también está acabando con los pequeí±os negocios, pues muchos han sido asaltados en varias ocasiones y además las ejecuciones los ha atemorizado más, indicó ayer Javier Arzápalo Aguilar, pionero fundador de la ex Unión de Pequeí±os Comerciantes ”Xaman Ek».
Recordó que desde que desaparecieron los apoyos en mercancía y en créditos para los microcomercios durante la administración de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), hace unos 30 aí±os, inició también la desaparición paulatina de las tienditas, así sean abarrotes, pescaderías, fruterías, sastrerías, carnicerías, etcétera.
Seí±aló que por lo regular quienes abren un pequeí±o negocio son personas adultas que han dejado de trabajar de manera formal en las empresas, y además porque ya no les dan empleo en otro lado, y por tanto tiene que buscar otra forma de subsistir y una de esas opciones es el pequeí±o comercio.
Dijo que antes existía la Unión de Pequeí±os Comerciantes ”Xaman Ek» en la zona de Puerto Juárez y lo que es actualmente el Parque del Crucero desde antes del inicio de la construcción de Cancún el 20 de abril 1970, e incluso los impuestos que eran muy sencillos se pagaban en Isla Mujeres antes de la creación del municipio Benito Juárez.
Mencionó que había auge en cualquier negocio que se instale en Puerto Juárez, a lo largo de la avenida José López Portillo, en la misma incipiente ciudad de Cancún y sus primeras colonias, sin embargo aí±os después poco a poco comenzaron a desaparecer porque el gobierno dejó de dar apoyos en mercancía por medio de la Impulsora del Pequeí±o Comercio (Impecsa) para pagar en quince días o un mes, así como los créditos del Banco del Pequeí±o Comercio (Banpeco).
Y aí±os más adelante, relató que con la aparición de los grandes supermercados, en los aí±os noventas y dos mil, esto vino a afectar aún más la economía de los pequeí±os comerciantes, y en la actualidad dijo que la situación es aún más difícil por la carga de numerosos requisitos municipales, estatales y federales para abrir un negocio.
Y peor aún, seí±aló que en los últimos aí±os la situación más grave que padecen los pequeí±os comerciantes son los constantes asaltos, extorsiones y las ejecuciones entre bandas de delincuentes, a tal grado que se han registrado balaceras en pequeí±os negocios.
Por ejemplo en una taquería que era socio de la Unión, seí±aló que en días pasados entró una persona drogada en el establecimiento con un cuchillo grande y visiblemente drogada, y en una pescadería el propietario seí±aló que la delincuencia atemoriza a los comerciantes porque no se sabe en qué momento van a atracar. En ambos casos dijeron que no se mencionen sus nombres ni les tomen fotografías.
Graciela Machuca
