Esconden violencia en el Sur de Quintana Roo para proteger la preferencia electoral de la 4T
Necesariamente Incómoda
Graciela Machuca Martínez
La violencia en la zona sur de Quintana Roo sigue en ascenso, mientras que el discurso de las personas representantes de la 4T que buscan un cargo de elección popular por esa zona la vida es color de rosa y para ellas, por fin a llegado el progreso, todo es paz y tranquilidad, como el pasado 23 de abril que el presidente en su mañanera presumió que en Quintana Roo no registro ningún asesinato cuando no fue así.
En tanto, en la vida real, mes con mes, docenas de familias caen en luto porque les asesinaron a un ser querido o en una severa crisis económica y emocional por los secuestros, las extorsiones, las víctimas lesionadas, los desplazamientos forzados.
La zona sur de Quintana Roo se ha convertido en un infierno ante la incapacidad de la Fiscalía General del Estado, de la Secretaría de Protección Ciudadana, así como de los gobiernos municipales de MORENA que optan por aplaudir un discurso plagado de falacias mientras la muerte y el terror se apoderan de la sociedad quintanarroense.
Los casos de violencia se están generalizando, por ejemplo, el pasado 20 de abril, fueron asesinadas dos personas y una más resultó gravemente herida como resultado de un ataque armado perpetrado en el interior de una vivienda en el el fraccionamiento Las Américas II en la ciudad de Chetumal, capital de Quintana Roo.
Alrededor de la media noche, hombres armados que viajaban en un automóvil tipo Aveo, color blanco, llegaron a la vivienda localizada en la calle San José con calle Luis Manuel y Panamá, dispararon en contra de tres personas y se dieron a la fuga rumbo al fraccionamiento Las Américas I. Después de las diligencias de ley y el escándalo que hicieron los efectivos de las diversas corporaciones policiales y militares, nadie supo por donde estaban los asesinos.
De esta manera se van sumando los casos sin investigar y la impunidad se va fortaleciendo.
El día 12 de abril fue encontrado un cuerpo decapitado en las inmediaciones del Parque Central de la comunidad de Sergio Butrón Casas, ubicada a unos 30 kilómetros de la capital del estado. Al lado del cadáver, que tenía huellas evidentes de tortura, fue encontrada una manta con un mensaje de amenazas.
Un caso que ha conmocionado a la sociedad quintanarroense del Sur de le entidad, es el asesinato del empresario, identificado como Jonathan “B”, muy conocido en la comunidad de Calderitas. Los hechos se registraron la madrugad del 27 de sobre el bulevar Bahía.
Sin embargo, las autoridades de seguridad pública y procuración de justicia tienen la instrucción de minimizar todo hecho de violencia, lo que representa un grave atentado al derecho de acceso a la justicia y dignidad de las víctimas, así como de sus familiares y demás víctimas indirectas, incluyendo a la misma sociedad, a tal grado que estos asesinatos de alto impacto, los tratan como si fueran simples faltas administrativas.
Con la excusa de la secrecía de las carpetas de investigación, con todo el poder institucional, minimizan la violencia, lo que demuestra, una vez más, que lo único que le interesa a la autoridad es el impacto electoral que tiene esta violencia generalizada en el Sur de Quintana Roo.
Recordemos, una vez más, que ninguna autoridad está haciendo trabajo de prevención del delito, lo que ha quedado demostrado con las cifras, a pesar de estar maquilladas, de incidencia delictiva que mes con mes emite el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En este espacio periodístico, además, de mi opinión profesional, de los hechos de la vida diaria, fundamento mi dicho con evidencias institucionales, como es la Encuesta Nacional de Seguridad Urbana levantada por el INEGI durante el primer trimestre de 2024 y las anteriores.
Lo que se le pide a la autoridad es solo hacer su trabajo como lo indica la ley, la cual dijeron que conocían cuando rindieron protesta y juraron cumplir la Constitución. Hay que recordar que un acto de corrupción es aceptar un trabajo cuando no se está calificado para ello.
La extrema violencia que vive la zona Sur de Quintana Roo por la incapacidad gubernamental de la 4T es un llamado a que la ciudadanía reflexiones su voto para los comicios del próximo 2 de junio. Aún tenemos la posibilidad de decidir qué tipo de gobierno queremos.
Graciela Machuca
