Albaí±iles explotados hoy todavía
POR ESTO
JOSí‰ MARíA MORELOS, 3 de mayo.- Como cada aí±o los trabajadores de la construcción celebran su día, este 3 de mayo no fue la excepción, sin embargo, pese a la ardua labor que desempeí±an siguen padeciendo de un pago laboral injusto y de la marginación en la mano de obra local.
Efraín Uc Collí, maestro albaí±il y contratista, indicó que el obrero del ramo de la construcción padece de muchas necesidades, como el de ser tomado en cuenta en la edificación de grandes obras en el municipio.
Manifestó que la mano de obra local ha sido marginada y mal pagada, por lo que las empresas y particulares prefieren contratar obreros de otras partes, hizo ver. Refirió, ante la falta de obras y por ende del trabajo en el municipio los alarifes a duras penas pueden cubrir los gastos de sus familiares.
”La canasta básica se ha disparado pero el salario mínimo no sube tanto, uno que tiene hijos debe cubrir la compra de útiles escolares, vestimenta, comida, servicios básicos como energía eléctrica y agua potable, al final no queda ni para un par de zapatos», expresó.
Seí±aló que el trabajador de la construcción debería obtener un sueldo por encima de los mil 500 pesos, mientras que el chalán un promedio de mil pesos a la quincena, lo suficiente para poder subsistir.
Apuntó, la vida del alarife es muy ardua y padece de muchas necesidades, lo cual las autoridades y los sindicatos deberían de contemplar al momento de distribuir las obras para que todos tengan trabajo.
Efraín Uc Collí manifestó que lleva trabajando más de 25 aí±os en la construcción, por la necesidad de sostener una familia, recordó que aí±os atrás los alarifes se sumaban en la construcción de escuelas y obras como el Mercado del Productor, sin tener la necesidad de salir del municipio en busca de trabajo, concluyó.