Nestora clama por su libertad y cuenta su historia

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Redacción

SemMéxico. Cd. de México, 23 febrero 2016.- La comandanta Nestora Salgado Garcí­a, acusada de 50 secuestros, ha decidido contar ella misma su historia que está siendo difundida —ví­a las redes sociales- por Avaaz, organización que busca dar voz a quienes no tienen otros medios.

En una carta escrita desde la cárcel cuenta su propia versión sobre ”qué fue lo que pasó, qué hice y qué no hice; pero sobre todo por qué lo hice».

Nestora Garcí­a fue integrante de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias del municipio de Olinalá, situado en la montaí±a del estado de Guerrero, donde fungió como comandanta hasta que fue detenida el 21 de agosto de 2013.

Diputados, senadores y activistas pro derechos humanos han sostenido que el proceso en su contra ha sido muy irregular, incluso se han realizado protestas en México y en ciudades de Europa, Australia y Estados Unidos demandando su liberación.

Aunque se ha difundido que está detenida por 50 secuestros, ella afirma en la misiva estar en la cárcel ”por un supuesto secuestro que nunca ocurrió», y aí±ade estar presa ”por luchar por la paz y por la justicia, este sí­ es un verdadero secuestro», considera.

Dice que en su pueblo, Olinalá, el miedo reinaba frente a una ola de violencia, donde sicarios violaban nií±as y nií±os, secuestraban indiscriminadamente y extorsionaban los negocios familiares ”sin que el Estado dijera o hiciera nada».

Fue cuando se unió a la policí­a comunitaria, ”no por gusto, sino por necesidad», porque el Estado no les proporcionaba la seguridad que le correspondí­a otorgar a la comunidad, y que organizarse ”era nuestro derecho como pueblo originario».

Afirma que al gobierno eso no le gusto y mucho menos ”cuando empezamos a denunciar a funcionarios públicos y autoridades por cometer delitos, muchas veces involucrados con el crimen organizado».

Cuenta entonces los motivos de su detención: ”Cuatro muchachas que estaban colaborando con los sicarios fueron detenidas por el pueblo, pero yo intervine para evitar que las quemaran. Nunca las privé de su libertad, ni las detuve por la fuerza».

Pide que quienes creen en ella presionen para que el Fiscal General del estado de Guerrero desista de ”las falsas acusaciones que me han hecho», lo mismo que al Tribunal Superior de Justica para que respete sus derechos humanos y ella sea sometida al debido proceso.

Multitud de organizaciones de la sociedad civil han considerado que se trata de un caso de criminalización contra los defensores de los derechos humanos por parte del Estado mexicano.

Graciela Machuca

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