Presiones y engaí±os se empiezan a conocer sobre pago de afectaciones por el Tren Maya

0

Necesariamente Incómoda

**Yucatán y Campeche con casos de inconformidad por incumplimiento de pagos sobre derecho de ví­a.
**Se sientan las bases para generar desplazamiento interno forzado por la megaobra ferroviaria.
Graciela Machuca Martí­nez
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) se ha encargado de aclarar que no habrá ningún caso de desplazamiento forzado por la construcción del Tren Maya, que todo será consensuado, pero tal parece que por las prisas y por una deficiente estrategia de comunicación, ya salieron a relucir los primeros brotes de inconformidad, en el estado de Yucatán, donde habitantes de Maxcanú decidieron plantarse frente a la maquinaria cuyos operadores tení­an la orden de derribar lo que obstaculizara su trabajo de limpieza de ambos lados por donde pasará la nueva ví­a férrea.
El argumento de los inconformes es que a costa de todo evitarán que sus viviendas y parcelas sean destruidas, a pesar que Fonatuar contraalega que ya le pagó los terrenos a la autoridad ejidal.
Los hechos se registraron el pasado fin de semana sobre uno de los puntos del Tramo 3 Calkiní­-Izamal, donde los trabajadores de las constructoras tienen la orden de derribar nueve casas y cultivos del área, por lo que mujeres y hombres se colocaron frente a las máquinas para impedirlo.
Las familias que reclaman su derecho a vivir en esa sitio dieron a conocer que unas 50 parcelas de la comunidad están en riesgo de ser destruidas, para dar paso a la ví­a del Tren Maya.
Tanto a directivos de Fonatur, como al Comisariado Ejidal les piden cuentas sobre quien les vendió esas parcelas, porque a los legí­timos ejidatarios no los tomaron en cuenta.
Otra preocupación que tienen los vecinos de Maxcnú es que varios de los terrenos por donde pasada la ví­a del tren son propiedad privada y hasta el momento no les han informado de una expropiación e indemnización conforme a la ley.
Por su parte, Fonatur aclaró que el dinero por las afectaciones se las entregó al comisario ejidal. También sostuvo que las obras no se encuentran interrumpidas y que tampoco tienen conocimiento de ”ningún altercado de consideración» en la zona (sic.).
La instancia seí±aló que hoy participó en una asamblea ejidal en la que se informó que los pagos por las afectaciones relacionados a la liberación del derecho de ví­a en el municipio de Maxcanú fueron realizados en el mes de mayo, directamente a los órganos de representación ejidal.
Incluso dijo que el comisario ejidal se comprometió a que en esta semana se procederá al pago de afectaciones de bienes distintos de la tierra, como albarradas, árboles frutales, cercas, entre otros.
”En la asamblea, personal de Fonatur explicó que el monto que se pagó al comisario ejidal meses atrás corresponde a una verificación aérea que se hizo y al avalúo que dicta el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin)».
El gobierno federal no solo debe cumplir con pagarle a los afectados el importe de sus tierras, para que se vayan del lugar, sino debe diseí±ar un proyecto integral de reubicación, porque el monto del pago de las afectaciones, si es que se los dan, no les alcanzará para iniciar un nuevo proyecto de vida en otra localidad.
Este es un ejemplo que el Tren Maya desplazará a grupos de personas, quienes serán ví­ctimas del desarraigo y la pobreza, si no son incluidos en proyecto de reubicación integral, pronto se gastarán el dinero y quedarán expuestos a la pobreza extrema, pero sin sus tierras.
Mientras Fonatur busca minimizar la protesta, dio a conocer la firma de un convenio con el gobierno del estado de Yucatán, ”con objetivo de sumar esfuerzos, recursos y capacidad en el ámbito de sus respectivas competencias para impulsar el desarrollo del Tren Maya en la entidad».
Entre los compromisos se encuentran: crear e implementar sistemas de comunicación efectivos, mediante los cuales se mantenga informado a la ciudadaní­a de los logros y beneficios del proyecto; el compromiso de crear lí­neas de acción para eficientar procesos; y fomentar mecanismos de participación ciudadana.
Fonatur está reforzando los trabajos en conjunto con cada uno de los estados en la ruta del Tren Maya. Hemos encontrado disposición y cooperación con todos. Tenemos el mismo objetivo: llevar desarrollo socioeconómico al sureste. Además, Yucatán será uno de los estados más beneficiados por la derrama económica del proyecto.
El Tren Maya recorre la totalidad del territorio de Yucatán de Oeste a Este.
El organismo federal ha dado a conocer inversiones en la entidad como la destinada a la Reserva Cuxtal, la integración de una estrategia turí­stica para la Ruta Puuc, la electrificación del tramo 4, entre otras.
Mientras tanto en Campeche, han surgido voces de denuncia en el sentido que los comisariados ejidales fueron presionados para firmar el contrato de una empresa que el Fonatur envió para las gestiones de los derechos de ví­a para el Tren Maya.
Infobae dio a conocer que el resultado de haber firmado el documento sin haber visto un avalúo, negociado el precio, conocer la afectación que tendrí­an al ceder sus tierras, sin tener asesorí­a legal y el acompaí±amiento de la Procuradurí­a Agraria es un pago inferior al que esperaban y que dicen, no coincide con lo que deberí­an recibir.
En medios de comunicación como Animal Polí­tico se lee que el pasado 12 de mayo de 2020, José Garcí­a Góngora, presidente del comisariado del ejido Cinco de Febrero, en el municipio de Champotón en Campeche, junto con Manuel González Juárez y Fermí­n Gómez Feliciano, secretario y tesorero del ejido, acudieron a la sede del gobierno federal de la entidad para cobrar un cheque que supuestamente debí­a corresponder a los derechos de ví­a que se les debí­a.
Sin embargo, se llevaron gran sorpresa al ver que el cheque recibido en el palacio federal por 2 millones 283 mil pesos, como pago de 26 hectáreas, que creyeron era el pago por derechos de ví­a que no habí­an recibido anteriormente como compensación por el paso sobre sus tierras del Ferrocarril del Suroeste, que ahora será el tramo 2 del tren Maya, en realidad fue la indemnización por la ocupación previa de sus tierras mientras se concreta el proceso de expropiación.
De acuerdo a la investigación periodí­stica, dicho pago estaba declarado en el documento en el que presuntamente fueron presionados a firmar por la empresa de Fonatur.
”No nos dejaron leer el contrato con calma. Nos dijeron aquí­ está el cheque, fí­rmele y después les vamos a dar las copias. Nos las dieron meses después, a finales de agosto, y ya fue ahí­ cuando supimos que firmamos un contrato de ocupación previa con miras a la expropiación y que aunque nosotros esperábamos dos pagos, uno por los derechos de ví­a ya existentes y otro de indemnización por la nueva ocupación y las afectaciones, no nos iban a dar más que esa cantidad», dijo el comisario de Cinco de Febrero al equipo de Animal Polí­tico.
De tal modo, solo recibieron un pago y no dos como esperaban. El primer cobro debí­a ser por derecho de ví­a, el cual se hace como compensación por el paso de una ví­a de transporte por sus tierras; por otro lado la ocupación previa es la compensación por el uso de terrenos mientras se concluye la expropiación, la cual finaliza al ser publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

Graciela Machuca

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *