Quintana Roo con un sistema de salud pública colapsado, mientras las acciones gubernamentales solo se ven en los discursos
Necesariamente Incómoda
Graciela Machuca Martinez
Las deficiencias en el sistema salud pública en el estado de Quintana Roo no solo afecta a la población que vive en la entidad, sino a miles de visitantes que no cuentan con seguros médicos o los recursos necesarios para acudir a los servicios privados, por lo que en caso de una emergencia tienen que hacer uso de los hospitales públicos, los cuales, día a día demuestran que los servicios estatales de salud están colapsados.Desde hace años he venido informando a través de este espacio periodístico que los hospitales de la Secretaría de Salud, del IMSS y del ISSSTE carecen de la infraestructura, equipos, insumos y personal suficiente para atender a la población quintanarroense, la cual queda a expensas de los discursos demagógicos de la clase política y gobernante que tiene la obligación de garantizar el derecho a la salud, entre otros derechos consagrados en la Constitución Federal.Cifras de los Servicios Estatales de Salud indican que del millón 900 mil habitantes de Quintana Roo, 657 mil es de población abierta, es decir el 45 por ciento, que deben recibir atención médica de la Secretaría de Salud Estatal, el 42 por ciento es derechohabiente del IMSS, el 10 por ciento del ISSSTE y el tres por ciento de las secretarías de Marina y Defensa Nacional. En la zona maya, la cifra para la población abierta aumenta al 77%.Con estas cifras vemos que el gobierno estatal, en coordinación con el gobierno federal, debe atender al 45 por ciento de la población, mismo porcentaje que está en estado de indefensión al no poder ejercer su derecho a la salud, porque el sistema de salud pública se encuentra en crisis, desde mucho antes de la pandemia, misma que fue utilizada para justificar la negligencia gubernamental.Hasta el momento, la actual administración estatal, no ha presentado un programa de trabajo para atender a esa población abierta, se supone que cuando decidieron postularse para contender a la gubernatura, ya conocían las necesidades de la población quintanarroense en materia de salud, entre muchas otras; si eso no fue así, entonces tuvieron el periodo de campaña para hacer diagnósticos de lo que requería el pueblo; si el tiempo no les dio, tuvieron el periodo de transición a partir de que se oficializó su triunfo al día de la toma de posesión, pero es el momento que apenas están buscando como hacer los diagnósticos.Después de la toma de posesión ya no es tiempo de hacer diagnósticos o hacer planeación, son momentos de presentar programas de trabajo con sus respectivos cronogramas y decir de que rubros presupuestales saldrán los recursos para construir nuevos hospitales con especialidades, centros de salud, así como reestructurar los ya existentes que hoy en día se encuentran en crisis, donde el personal médico se enfrentan a situaciones que tienen que ver como mueren sus pacientes porque no hay el equipo necesario, los medicamentos, los insumos para salvarles la vida, porque los administradores no saben cómo dotarlos de lo elemental para operar un sistema público de salud que hasta ahora todo se queda en burocracia.
MIENTRAS LA POBLACIÓN ABIERTA CARECE DE SERVICIOS INTEGRALES DE SALUD, EL GOBIERNO DEL ESTADO BUSCA SUBIRSE A LAS ACCIONES DEL IMSS E ISSSTE
Lo que hemos visto es que hace un mes la gobernadora viajó a la ciudad de México para sostener reuniones de trabajo con los titulares del IMSS y del ISSSTE, pero nada ha dicho hasta el momento que gestiones ha realizado ante la Secretaría de Salud Federal, ante el famoso Instituto del Bienestar para atender a esa población abierta.En la reunión con el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Alejandro Robledo Aburto, se analizó la posibilidad de construir una Unidad de Medicina Familiar en Chemuyil, municipio de Tulum; en Kantunikín, municipio de Lázaro Cárdenas, en Playa del Carmen y Cancún, así como un consultorio en Holbox, es decir, la preocupación versa en torno a las áreas turísticas del estado.Se programó una visita a Quintana Roo para revisar la infraestructura hospitalaria, el proyecto de ampliación de un hospital en el sur del estado, así como la construcción de las unidades de medicina familiar, en caso que esas inversiones se lleven a cabo será una responsabilidad del gobierno federal, porque de allí saldrán los recursos y los beneficiarios serán los derechohabientes del IMSS, nadie más. También se reunió con Pedro Zenteno Santaella, director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), quien le informó que cada uno de los 11 municipios de la entidad tendrá un Centro de Atención Médica ( cuando ya existe en la capital del estado, en Carrillo Puerto, José María Morelos, Solidaridad, Cancún y Cozumel) y para ello trabajarán de la mano con los Ayuntamientos para que aporten el local, báscula para bebé, para adultos y mesa de exploración sic….Entre la gestoría realizada se cuenta con la expedición de las constancias de incapacidad médica para que el derechohabiente tenga el servicio en su municipio sin necesidad de trasladarse a Cancún o Chetumal.Al titular del ISSSTE se le dio a conocer demandas como la remodelación de la clínica de Chetumal y de las instalaciones del ISSSTE en Cancún, infraestructura, que, nuevamente, serán sometidas a un estudio para ampliar el número de camas hospitalarias.Lo que haga o deje de hacer el ISSSTE en Quintana Roo será en beneficio de sus derechohabientes, es decir, de la burocracia, por lo que sigue quedando fuera la población abierta.
LOS ASESORES DEL GOBIERNO DEL ESTADO EN MATERIA DE SALUD, SE PIERDEN EN QUERER CONSTRUIR UNA IMAGEN, MIENTRAS PERSONAS SE MUEREN EN HOSPITALES Y EN SUS CASAS
Recientemente, la Beneficencia Pública Nacional y Estatal destinaron recursos para entregar 200 lentes para apoyar a personas en condiciones de vulnerabilidad por tener una discapacidad visual y carecer de los recursos económicos. La directora general de la Beneficencia Pública Claudia Gómez Verduzco dio a conocer que estas acciones son resultado de la suma de voluntades del Gobierno del Estado con la Beneficencia Pública Nacional y la Beneficencia Pública Estatal.ES posible que el gobierno del estado haya participado con las consultas oftalmológicas y de optometría y por esa razón, le correspondió a la titular del Poder Ejecutivo Estatal salir en la foto entregando los lentes a las personas beneficiadas y repartiendo abrazos, pero de acciones de salud para atender de manera integral a la población abierta, no se sabe nada hasta ahora.Desde luego que la entrega de 250 lentes para el millón 900 mil habitantes de Quintana Roo es muy aplaudido, porque hay personas beneficiarias, pero también no se debe olvidar que la prioridad es una atención integral en la salud de toda la población quintanarroense. El desabasto de medicamentos, equipos, insumos, es una prioridad que debería tener la gobernadora, antes de tomarse la foto por la entrega de 250 lentes, desde luego que muy útiles.A la gobernadora le están fallando los asesores en materia de salud pública, porque quieren manejar su imagen con acciones que corresponden al gobierno federal, como es la operación del IMSS y del ISSSTE que ya tiene una población definida y que esos beneficios no pueden extender a la multicitada población abierta. Esta población se está muriendo en los hospitales de la Secretaría de Salud, porque estos no tienen presupuesto, sus instalaciones se están cayendo, no hay equipo, ni medicamentos, mucho menos material de curación, entre otros insumos; otras personas enfermas se mueren en sus casas porque no tienen los recursos económicos para ser trasladados a un hospital, donde también podrían morir, pero bajo la mirada del personal médico, que no puede hacer gran cosa para salvar vidas, porque hay desabasto de todo.
LA REALIDAD DEL SISTEMA DE SALUD EN QUINTANA ROO QUE LAS AUTORIDADES BUSCAN CUBRIR SOLO CON EL DISCURSO
Personal del Instituto Mexicano del Seguro Social informó a este espacio periodístico que desde la semana que acaba de terminar empezaron a diferirse las consultas de especialidades hasta el mes de enero, lo que demuestra la saturación de los servicios y no es que el personal existente no quiera trabajar. Hay especialidades que tienen fechas disponibles hasta dentro de seis meses.Otra realidad que se quiere esconder con el discurso y los comunicados de prensa plagados de promesas como si continuara la campaña es que el Hospital General de Chetumal amaneció el 11 de noviembre sin guantes ni jeringas.En el IMSS también se enfrentan tanto médicos como la población beneficiaria a un doble discurso en lo que se refiere a la dotación de medicamentos, porque se el asunto se ha convertido en un tema de imagen y de manejo estadístico, cuya responsabilidad recae en los médicos quienes tienen que prescribir equivalentes, lo cual, no necesariamente es lo óptimo, pero de esa manera se cubre el requisito de surtir la receta, aunque sea parcialmente y no solucione los grandes problemas de salud de la población.Se habla que se construirá infraestructura para atención de la salud en municipios de Quintana Roo, lo cual es una falacia, porque al revisar el Presupuesto de Egresos de la Federación, el presupuesto de la Secretaría de Salud, apenas muestra un aumento del tres por ciento, pero en términos reales, si descontamos la inflación, eso quiere decir que no solamente no aumentó, sino, inclusive, retrocedió, por lo que no se puede decir que habrá obra en infraestructura, cuando no sabemos realmente que es lo que se a aprobado para infraestructura en salud en general y en especial para Quintana Roo. Un asunto que no quieren atender, quizás por falta de conocimiento o por desinterés es el olvido en que tienen la estructura de unidades móviles de salud, lo que eran las caravanas, pero ahora hay unidades móviles, tanto federales como estatales, todos los recursos del programa, incluido el personal de Médico en tu Casa está inmovilizado. Todo ese recurso humano y ese recurso material pudiera implementarse desde ya para atender fines de semana, es decir, viernes, sábado y domingo a las comunidades más lejanas y precarias.Mientras el discurso sea la única herramienta para resolver los problemas reales de la sociedad quintanarroense, todo quedará en acciones gubernamentales construidas de arena.
Graciela Machuca
