Playa del Carmen, otro paraíso turístico que crece a costa de la población trabajadora que vive en la pobreza, marginación y en el olvido
Necesariamente Incómoda
Graciela Machuca Martínez
En el municipio de Solidaridad, Quintana Roo, principalmente en la ciudad de Playa del Carmen, tanto la población residente como la visitante se enfrentan a un clima de inseguridad, caos vehicular, descontrol de precios, falta de agua, violencia contra las mujeres, entre muchos otros agravios que a ninguna autoridad le interesa atender, cada quien se cree su discurso demagógico y actúan como si sus resultados fueran los que la sociedad reclama.
Caminar por las calles de Playa del Carmen, por sus colonias populares, las localidades aledañas, se da uno cuenta del México real, el que no esta fotografiado para campañas publicitarias para promover el turismo y la inversión, allí se asientan miles de familias que alguna ocasión decidieron migrar para alcanzar un mejor nivel de vida, las condiciones en las que viven seguramente son peores de las que decidieron dejar atrás en sus lugares de origen o residencia.
Pero la clase política de Quintana Roo sigue decidida a usufructuar los ingresos que obtiene el Ayuntamiento de Solidaridad, porque a casi año y medio de las elecciones municipales del primer domingo de junio de 2024, ya se encuentran en plena campaña preelectoral, sin importarles que los problemas sociales del municipio es urgente resolverlos, al contrario, le apuestan a la anarquía en el desarrollo urbano es histórica solo por mencionar la colonia Luis Donaldo Colosio, porque de allí salen ganando con sus empresas, mientras que es población que requiere servicios públicos se convierten en sus electores cautivos.
Los diferentes grupos políticos del estado han gobernado Solidaridad, en la administración pasada le tocó a MORENA, cuya presidenta municipal saqueó las arcas del Ayuntamiento según denuncia publicas de la ahora autoridad municipal, la actual edil, de origen panista, dijo que metería a la cárcel a su antecesora, pero de esas promesas electorales, ya ni ella se acuerda; el gobierno municipal está endeudado, como todos los de Quintana Roo, los recursos propios, así como de los procedentes de los gobiernos estatal y federal son insuficientes para atender las necesidades no solo de Playa del Carmen, sino de todo el municipio.
En este municipio, como en todos los importantes destinos turísticos de México se observan básicamente dos realidades, la de los grandes inversionistas y la clase política y la del pueblo de a pie, de un lado lujos y excesos y del otro miseria, abusos y violencia.
La grandeza de la industria turística en Playa del Carmen crece gracias al esfuerzo de la clase trabajadora que sobrevive en condiciones de marginación y olvido gubernamental, viviendas paupérrimas, servicios públicos deficientes, derechos a la salud, educación, y a un medio ambiente sano, solo se pueden ver en la Constitución y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, pero en la vida diaria de este municipio, solo son una ilusión.
Playa del Carmen no le pide nada a Cancún en cuestiones de violencia. Un recorrido por la agenda de la violencia en este destino turístico evidencia que de nada han servido los discursos y mucho menos las millonarias inversiones en materia de seguridad pública, porque la delincuencia, en lugar de ir perdiendo terreno, va consolidando su poder en todo el municipio. Feminicidios, desaparición de personas, homicidios dolosos, abusos sexuales, extorsiones, entre otros delitos conforman el catálogo de la delincuencia cuya línea se diluye con quienes deben aplicar la ley.
La tarde de este jueves 5 de enero una mujer empleada de una ferretería fue baleada por un individuo que ingresó al establecimiento, pero este caso no es aislado, ya que de manera frecuente, los establecimientos comerciales en Playa del Carmen son asaltados y quienes se llevan la peor parte es el personal, porque en muchas ocasiones resultan lesionados o golpeados por los delincuentes, cuando no es una farmacia, es una tienda de conveniencia o un restaurante, donde a todos los comensales les quitan sus pertenencias, desde luego que la policía municipal prefiere no aparecerse, para evitar un enfrentamiento o para no tener que colaborar en las investigaciones que inicia la fiscalía.
En este caso, hay un video en el que se observa que un hombre con gorra y cubrebocas entra a la ferretería y dispara sobre la mujer, luego sale corriendo. La lesionada fue llevada a un hospital. Vecinos del lugar dieron a conocer que negocios aledaños ya han sido baleados, sin que ninguna autoridad se preocupe por brindarles seguridad.
Por la madrugada del mismo jueves cinco de enero dos personas resultaron heridas de bala en el fraccionamiento La Guadalupana en Playa del Carmen. Las víctimas son una mujer y un hombre taxista, quienes fueron baleados por un hombre en esa misma zona. Ambas personas lesionadas fueron trasladadas a un hospital por la gravedad de las heridas que presentan. Si bien es cierto que la policía detuvo a dos presuntos responsables, de lo que se trata es que se pongan en marcha políticas públicas de prevención de los delitos y no querer tapar el pazo después del niño ahogado.
En el área verde del fraccionamiento Puerto Maya fue localizada una víctima de agresión sexual el pasado martes 3 de enero por la noche. Luego que paramédicos le brindaron los primeros auxilios fue trasladada a un hospital. Se informó que la víctima sufrió la agresión sexual en uno de los departamentos del referido asentamiento humano.
Tan solo con revisar los comunicados oficiales de Seguridad Pública de Playa del Carmen se percata uno de la violencia que impera en ese municipio, sin contar la cifra negra que según la Comisión Nacional de Derechos Humanos y el INEGI, rebasa el 95 por ciento.
Graciela Machuca
