Chetumal: Chile jalapeí±o, en ví­as de extinción

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Por Juan Rodrí­guez

EJIDO CAOBAS, OTHí“N P. BLANCO, 11 de octubre.— Cuando hace algunos aí±os la producción de chile jalapeí±o era sinónimo de desarrollo económico para las comunidades rurales, en la actualidad es un producto agropecuario ya en peligro de extinción en la parte sur de Quintana Roo, ya que de tres mil hectáreas que se llegaron a cultivar y de levantar más de 40 mil tonelada de picante, hoy no se llega ni al 15 por ciento, seí±alaron productores que este sábado iniciaron el corte del producto.
El termómetro lo tienen los compradores de picante que por muchos aí±os han estado comprando el producto en Quintana Roo, como son los seí±ores Ciro Olartis López y Juan López Várguez, quienes aí±os atrás llegaron a movilizar más de 40 mil toneladas por temporada, sin embargo en la actualidad si al caso podrí­an llegar a unas 500 toneladas, así­ lo seí±aló Reinaldo Guzmán Juárez, productor del ejido Caobas y responsable del Cader número 3 del programa Procampo.
Seí±aló que de acuerdo a la información que tiene en el Cader número 3, en la zona de Nicolás Bravo, unos 100 productores son los que sembraron picante en una superficie de apenas 50 hectáreas, de la cual esperan levantar cuando menos 10 toneladas por hectárea, con las que sólo estarí­an levantando 500 toneladas en la temporada.
Recordó que aí±os atrás la producción de picante era motivo de desarrollo de las comunidades, los productores generaban miles de fuentes de empleo para la siembra, cultivo y cosecha, sin embargo en la actualidad esto ya pasó a la historia y sólo quienes lucran con el membrete de los productores siguen manejando estadí­sticas de alta productividad, pero ni ellos saben la realidad del campo.
En el caso del ejido de Caobas, unos cuantos hombres del campo lograron sembrar este producto, como es el seí±or Antonio Guzmán Silva, que se puede considerar como el principal productor de picante en la zona, ya que con esfuerzo propio sembró 6 hectáreas, cuya cosecha inició este sábado; sin embargo, en otros ejidos los productores de picante apenas alcanzaron a cultivar una media hectárea.
Consideró que la producción de picante se está extinguiendo debido a la falta de apoyos del Gobierno del Estado, ya que a este producto nunca le metieron recursos, pese a que se levanta buena cosecha y genera fuentes de trabajo para todas las familias de las comunidades.

Graciela Machuca

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