Doí±a Domitila, tejedora y bordadora

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POR ESTO

VICENTE GUERRERO, LAZARO CARDENAS, 2 de marzo.- Sufrió los embates del huracán ”Beulah» en 1967 en medio de la selva y en ese entonces ni las autoridades sabí­an la existencia de esta comunidad, contaba ayer Domitila Cobá Cupul, tejedora de punto de cruz, bordadora y urdidora de hamacas en Vicente Guerrero, antes San Pedro; su hijo Gregorio Caamal Cobá también vive en la comunidad.
Doí±a Domitila Caamal Cobá nació el siete de mayo de 1951, hace casi 67 aí±os, en la población de Temozón, Yucatán, y cuando llegaron sus padres a estas tierras, en 1958, ella apenas tení­a siete aí±os de edad, pero recuerda que en ese entonces en este lugar solamente viví­an unas siete personas y era selva.
Su padres, quienes ya fallecieron y eran originario de Chichimilá, Yucatán, arribaron a este lugar selvático más o menos en 1958 en busca de trabajo, porque en el vecino estado no habí­a trabajo ni comida, pero una vez en este lugar comenzaron a sembrar frijol, maí­z y calabazas para poder sobrevivir.
Relató que en ese entonces no habí­a carretera sino solamente un camino de terracerí­a y por medio de éste llegaron caminando desde Ignacio Zaragoza o Kilómetro 80.
Ella recordó que a mediados de 1967, hace casi 51 aí±os, estaban viviendo en esta localidad cuando de pronto les azotó el huracán ”Beulah» de categorí­a cinco en la escala Saffir-Simpson, sin previo aviso porque en ese entonces ahí­ no tení­an radios, no se habí­an inventado los teléfonos móviles ni tampoco habí­a carreteras como ahora.
En el tiempo del huracán, de sus ocho hijos ya habí­a nacido el primero de apenas nueve meses de edad y en medio de los vientos junto con su esposo Esteban Caamal Poot (fallecido hace dos aí±os) se fueron a refugiar en la vivienda endeble de su suegra que era de guano y madera, porque todaví­a no habí­a casas sólidas.
Pero estaban resguardados en la palapa de su suegro cuando de pronto se derrumbó la casa, alrededor de las 12 de noche, completamente a oscuras, porque tampoco habí­a energí­a eléctrica todaví­a en este poblado, y así­ bajo la tempestad se escondieron debajo de una mesa hasta que amaneció y disminuyeron los vientos.
La ayuda por parte del gobierno nunca llegó, puesto ni siquiera sabí­an acerca de la existencia de este poblado que inicialmente denominaron San Pedro, pero más adelante fue nombrado oficialmente como Vicente Guerrero.
Después del huracán tuvieron que salir adelante solos, sin la ayuda de nadie, y fue hasta el 22 de octubre de 2005 cuando de nueva cuenta otro fenómeno atmosférico, el huracán ”Wilma» los golpeó severamente, pero en esta ocasión contaron con el apoyo del gobierno. Antes el septiembre de 1988 hubo el huracán que se llamó ”Gilberto», sin embargo destacó que éste no se sintió mucho en Vicente Guerrero.
En la actualidad doí±a Domitila Cobá Cupul vive en la comunidad de Vicente Guerrero, entre La Esperanza y Kantunilkí­n, en compaí±í­a de su hijo Gregorio Caamal Cobá y su hija Amada Caamal Cobá, ambos con padecimientos epilépticos desde que eran pequeí±os.

Graciela Machuca

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