La recuperación de playas, impostergable
POR ESTO
El sector hotelero del destino pide a la autoridad estatal trabajo inmediato para la definición del mecanismo que se aplicará para resguardar la duna costera quintanarroense a fin de garantizar el principal activo turístico de la región, que son las playas públicas. Este aí±o vence la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que se tiene para el proyecto, y sin este permiso, todo esfuerzo podría ser inútil.
Y es que a decir de algunos de los líderes del sector hotelero del destino, aunque en marzo pasado, ya fue publicado en el Periódico Oficial de Quintana Roo el decreto por el que se crea el Fideicomiso de Seguridad, Desarrollo Social y Manejo Integral de la Zona Costera, que tendrá entre sus funciones gestionar recursos para la recuperación de playas de Quintana Roo, se desconoce a ciencia cierta cuál será el mecanismo que se seguirá para lograr esa recuperación.
Lo cierto, seí±ala el sector, es que en los últimos cinco aí±os, se ha perdido más del 50% de volumen de arena que se colocó en la última recuperación y aunque se tiene cierta estabilidad en la duna, hasta ahora el destino ha sido privilegiado en no tener un impacto directo de huracán, lo que puede ser el mayor riesgo.
En el caso de algunos tramos costeros ubicados en Riviera Maya, Cancún y en Cozumel, la erosión amenaza nuevamente la costa quintanarroense y aunque la pérdida de arenales todavía no pone en riesgo ninguna infraestructura hotelera como se registró con el paso del huracán Wilma en 2009, el riesgo continúa y un solo fenómeno hidrometeorológico podría tirar con la operación de la industria turística.
Cabe seí±alar que desde principios de aí±o, hoteleros del destino como Carlos Gosselin, ex presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún y José Chapur, presidente honorario del sector, seí±alaban que era fundamental definir el mecanismo de recuperación, pero sobre todo hacerse de recursos para atender cualquier contingencia.
El tema central, sin embargo, se concentra, como seí±alaba José Chapur, en la urgencia de retomar el proyecto y actualizar la Manifestación de Impacto Ambiental, que precisamente este 2018 vence.
En este sentido, se seí±ala que aunque ya salió el decreto del Fideicomiso y se han planteado algunos planes de financiamiento, todavía no se tiene un panorama claro ni definido por parte de la autoridad para saber cómo se dará el proceso y en ello, el sector reitera que es importante la transparencia y rendición de cuentas, pues los recursos de Zona Federal Marítimo Terrestre se siguen pagando pero no se sabe nada más claro en torno al proyecto de recuperación.
En la última información que se daba a conocer, se mencionaba por parte de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente que este Fideicomiso podría ser financiado mediante la bursatilización de las aportaciones de Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) con el acuerdo de los municipios.
Este proceso le permitiría al destino obtener recursos o financiamiento a través del fideicomiso y con ello se podría garantizar la obra.